Bienvenido al paraíso

Los Ángeles, 1936. Jack McGurn llega al barrio de Little Tokyo y allí conoce a una joven japonesa de la que se enamora, pese al rechazo de sus padres, que no aprueban la relación. Poco después estalla la II Guerra Mundial y el gobierno de los EEUU ordena ingresar a toda la población nipona en campos de prisioneros.

Alan Parker vuelve aquí a tratar un tema de compromiso sociohistórico, como ha hecho en casi la mitad de sus películas. Entre ellas tenemos "El expreso de medianoche", una crítica al sistema penitenciario turco; "Birdy", donde narra los trastornos de un joven enrolado para la guerra del Vietnam; "Arde Mississipi", en la que analiza la América profunda del Ku-Klux-Klan; o "Las cenizas de Ángela", retrato de una infancia de miseria en una ciudad irlandesa. En "Bienvenido al paraíso" denuncia un hecho histórico poco conocido, como es el papel del gobierno estadounidense frente a los americanos de origen japonés durante la II Guerra Mundial.