Vídeo: «Festival de la carne de perro»: 11 semanas para lograr #StopYulin

Con el solsticio de verano (21 de junio) se celebra en Yulin, una ciudad de la provincia china de la provincia de Guangxi (sur del país, en la frontera con Vietnam), el denominado «Festival de la carne de perro». Se calcula que unos 10.000 canes, a los que en los últimos años se han sumado también gatos, son sacrificados y cocinados para festejar la llegada de la nueva estación.

Faltan 11 semanas. Por ello, distintos grupos animalistas están pidiendo ya a través de las redes sociales como Twitter, por ejemplo, que se detenga esta cruel tradición: #StopYulin.

Una de ellas, Humane Society International (HSI), ha compartido un vídeo, así como imágenes, de la «masiva matanza de perros y gatos» que tiene lugar en la ciudad de Yulin, incluso fuera del periodo programado para la celebración del Festival, «pese a que las autoridades locales lo niegan», explica Peter Li, portavoz de la organización en China.

HSI estima que 300 perros son sacrificados cada día en Yulin para convertirse en comida: «Los perros son golpeados hasta la muerte en lugares próximos a centros escolares, por lo que sus lamentos y chillidos pueden ser escuchados por los niños», asegura Li.

HSI ha filmado el vídeo y tomado las imágenes entre el 29 de marzo y el 2 de abril, confirmando que la carne de perro se encuentra disponible en los restaurantes de Yulin sin problemas. «Hay un constante abastecimiento con, al menos, un camión cada día trayendo perros vivos de áreas del alrededor de Yulin, así como de otras partes del país», continúa.

Mal ejemplo para los niños

«He visitado tres mataderos en Yulin y he observado que numerosos animales portaban aún sus collares, señal inequívoca de que se trata de mascotas robadas. Y he sido testigo de cómo los perros y gatos son aporreados con barras metálicas ante la mirada del resto de compañeros que ocupaban con ellos sus insalubres jaulas», detalla Li. «Perros traumatizados que esperan su turno para correr la misma suerte que los animales que, una vez destripados y desmembrados, son colgados en ganchos y cuya sangre inunda el suelo», continúa.

«Instamos a nuestro Gobierno a que acabe con estas actividades ilegales en las que está envuelto el comercio de carne de perro, un cáncer que solo tiene negativas consecuencias para la reputación de China, cuyas leyes medioambientales son muy laxas», manifiestan desde Capital Animal Welfare Society. «El "Festival de la carne de perro", lejos de ser una tradición, como aseguran sus defensores, supone una desagradable ofensa para nuestros ancestros».