Desconocemos cuándo cambiar de sillita infantil

El dato responde a un estudio de la firma Britax, e incide en que el 23% de los padres cambiaría la sillita infantil o sistema de retención infantil (SRI) con la llegada de un nuevo hijo, y un 21% cuando se viera en la necesidad de contar con más espacio en el coche. Además, al elegir una sillita solo el 38% recibe ayuda por parte de personal cualificado.

Por otra parte, el 33% de los padres reconoce haber viajado con su hijo sin la silla adecuada; la mayoría, el 44%, por no tener una a mano, el 35% en al menos cinco ocasiones, y el 10%, más de 20 veces.

El informe de Britax alerta sobre la falta de conexión entre las buenas intenciones de los padres y el cumplimiento de las normas de seguridad.

De hecho, el 24% de los europeos compra la primera sillita cuando el bebé ya ha nacido, aunque se recomienda hacerlo con anterioridad e, incluso, en algunos países está prohibido abandonar el hospital sin ella.

El 9% de los encuestados no comprobó si la silla de seguridad era compatible con su coche, el 19% se informó a través de internet y el 18% dedicó menos de una hora a asesorarse sobre sus características. Otro dato de lo más elocuente: el 67% dedicó más tiempo a elegir un smartphone o una tablet que a elegir la sillita.

También es preocupante que el 31% reconociese haber superado el límite de velocidad con su hijo a bordo, con diferencia entre sexos: el 38% eran hombres, frente a un 25% de mujeres. Además, un 21% admitió haber comido mientras conducía y un 16% haber usado el teléfono sin el manos libres mientras viajaba con niños.