Insecto de la galeruca
Insecto de la galeruca - josé ramón ladra

La galeruca devora Moratalaz

Los vecinos se ven obligados a mantener las ventanas cerradas por la invasión de esta plaga

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Jerusalén Araus es una vecina del barrio de Moratalaz. Vive en un piso 14 en la calle Hacienda de Pavones y, pese a la gran altura de su vivienda, el insecto de la galeruca se cuela en su casa. Este escarabajo del olmo, que llegó a Madrid hace cuatro años y que en Madrid Salud catalogaban como «invasor ocasional», tiene apresados a los vecinos de este distrito que, con las altas temperaturas que soporta la capital, se ven obligados a mantener sus ventanas cerradas para no recibir a estos incómodos visitantes. «Enciendes la luz y se te llena el techo de esas cucarachillas. Los árboles están secos. He puesto numerosas quejas al Ayuntamiento, pero no dejan de aparecer», explica esta madrileña.

Según informaron desde el Ayuntamiento, durante tres semanas el departamento de Madrid Salud decretó plaga: desde el 25 de mayo hasta el 8 de junio. A día de hoy, las mediciones dan negativo, aunque la presencia del insecto es evidente.

El Área de Medio Ambiente y Movilidad tiene complicada la labor de extinción en la ciudad. Durante 2014 se produjo una gran infestación en gran parte de los olmos de la zona sureste del municipio. «Es difícil erradicarlos porque hay que proteger los árboles y porque el uso de productos químicos en la vía pública hay que hacerlo con precaución», explican desde Madrid Salud.

Desde la oficina de atención al ciudadano Línea Madrid, ayer mismo, informaban a los ciudadanos de las recomendaciones en caso de sufrir la presencia del insecto. Algunos afectados indicaban dónde había. Como explicaron desde el Ayuntamiento: «No es una cuestión solo de Moratalaz,sino de toda la capital».

Rápida reproducción

El insecto se reproduce rápidamente y la falta de agua por la escasez de lluvia no facilita su extinción. Durante la primavera, en el mes de mayo, los insectos adultos salen de sus refugios y se sitúan sobre las hojas de los olmos, de las cuales se alimentan, agujereándolas. Se aparean e inician la puesta a los pocos días, generalmente en la segunda quincena de mayo y el mes de junio. Las hembras, en un mes, depositan sus puestas sobre el revés de las hojas, en grupos de cinco a veinticinco huevos, poniendo cada una, por término medio, de cuatrocientos a setecientos. El período medio de incubación es de ocho días.

Ver los comentarios