Vista de Villaluenga del Rosario, donde Alfonso Moscoso espera una nueva victoria del PSOE. :: LA VOZ
Jerez

Cuando el censo son 464, se hace 'microcampaña'

Así se ganan los votos en el pueblo más pequeño de Cádiz

CÁDIZ. Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Alfonso Moscoso, alcalde de Villaluenga del Rosario, el pueblo más pequeño de la provincia (479 habitantes), dice que él no hace campaña, sino «microcampaña» electoral. «Aquí votan 464 personas, y yo intento hablar cara a cara con las 464. Es mucho más efectivo, a la hora de transmitir propuestas, que el mitin o la pegada de carteles».

Así que reparte el programa casa por casa, llama a todos los vecinos por su nombre o por su apodo, y aprovecha para sentarse con ellos, si hay tiempo, y preguntarles por cómo les van las cosas, «aunque en Villaluenga es imposible no saber cuáles son los problemas de unos y las alegrías de otros». «Somos muy poquitos».

Tan 'poquitos' que el Partido Popular ha 'importado' a la candidata desde Cádiz. Adela Fernández, exconcejal con Teófila, lo considera «una opción lógica, porque no hay juego democrático cuando los habitantes del pueblo solo pueden elegir entre votar a una persona o no votar». Para Moscoso, es «una tomadura de pelo» y «una falta de respeto». «Si en Villaluenga no hay vecinos suficientes como para formar una lista política, montarla 'artificialmente', con seis nombres de fuera, es forzar la verdadera voluntad de los vecinos».

Adela Fernández explica que la campaña en Villaluenga «no tiene nada que ver» con aquella otra en la que participó en la capital, «con despliegue de caravanas y acciones barrio a barrio». Cuando menos de 50 votos pueden darte un concejal, «el programa hay que contárselo ciudadano a ciudadano». Moscoso resopla y niega que los populares hayan hecho campaña. «Se han limitado a ofrecerle al pueblo un puñado de promesas imposibles de cumplir: un nuevo colegio (eso depende de la Junta), un médico las 24 horas (lo mismo) y hasta una piscina climatizada (hacen falta 50.000 habitantes para que sea sostenible)», recalca.

En las últimas municipales, el PP también importó a su candidato (Daniel Barea), y obtuvo un concejal de los siete que componen el pleno. Adela Fernández confía en repetir o mejorar los resultados. «No creo que haya que ser valiente para presentarse en un pueblo que no es el tuyo, porque mi compromiso con mejorar la vida de los ciudadanos no entiende de límites municipales», insiste.

A Moscoso, lo de los candidatos de fuera le parece «surrealista». «Qué menos se le puede pedir a un político que el conocimiento profundo de lo que pasa en el sitio en el que vive...».