'Las Chirigóticas' acercan mañana el carnaval gaditano al escenario del Festival de Teatro del Mar de Cartagena

'Las Chirigóticas', un grupo formado por las actrices Ana y Alejandra López Segovia, Teresa Quintero y Pepa Rus ('La Macu' en la serie de Telecinco Aída) acercan mañana el carnaval gaditano al escenario del Festival de Teatro del Mar de Cartagena, según informaron fuentes de la organización del evento en un comunicado.

De este modo, la cuatro actrices cantarán, bailarán y actuarán durante hora y media con unos textos donde los juegos de palabras y los dobles sentidos impregnarán toda la función. "Las Chirigóticas realizarán una sátira despiadada del vecino, del gobernante, de las costumbres de la vida cotidiana, con un humor perspicaz de la calle trasplantado a la música, al cante y al teatro", indicaron las mismas fuentes.

Y es que, defienden que el Carnaval es un momento de transgresión que "permite darle la vuelta a casi todo". Sobre el escenario, cuatro expertas del carnaval gaditano con más de 12 chirigotas en su repertorio que han recorrido año tras año las calles de Cádiz, hasta dar lugar a este espectáculo sin fecha fija ni caducidad.

Estas jóvenes se unieron para dar lugar a tres historias independientes, basadas en tres chirigotas del repertorio de La Chirigota de las Niñas. Es decir, un grupo de personas que se agrupa para participar en el Carnaval, pero sin integrase en la programación oficial, realizando sus espectáculos en la calle.

Con este espectáculo, se realiza un recorrido por tres escenas pasadas por el tamiz de la chirigota gaditana. En la primera, 'La tela te lo vale', donde unas gitanas gaditanas venden ropa en un mercadillo y desplegan unas dosis de filosofía vital.

Después, una visión de la inmigración, 'Las emigrantas', desarrollado desde el punto de vista del gaditano que se va buscando trabajo (narrando con ironía y gracia las diferencias culturales). Por último, 'Cambio de estado', muestra el desarrollo de una despedida de soltera al modo carnavalesco.

"Si bien es verdad que se pierde cierta frescura al pasar de la calle al escenario, se gana a cambio rigor escénico. La música, por su parte, apoya perfectamente la narración y, lo mejor de todo, es la adaptación chirigotera del padre nuestro", finalizaron las mismas fuentes.