Lapo Elkann, el coleccionista de mujeres y noviazgos breves

El heredero de la Fiat acaba de romper con su enésima novia, una joven canaria. Se declara un «bulímico existencial»

Roma Actualizado: Guardar
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Lapo Elkann, de 37 años, soltero de oro, empresario, heredero de la Fiat y de la familia Agnelli, ha roto con su novia española, la joven canaria Marina Peñate, de 26, una relaciones públicas con la pasión por la moda que vive a caballo entre Las Palmas, Milán y París gracias a su trabajo en la tienda de prêt-à-porter de su familia. Poco ha durado su noviazgo: comenzaron a salir en el verano e hicieron pública su relación en octubre, con una imagen de ambos que Elkann publicó en Instagram con este mensaje: «Un muy muy muy dulce domingo parisino». Pero conociendo la vida sentimental del rico y extravagante miembro de los Agnelli, nadie creía que pudiera llegar a puerto.

Han sido innumerables, y en general de muy corta duración, sus romances.

Ahora, la revista «¡Hola!» ha cazado al joven conquistador de la mano de una escultural modelo venezolana, Giulianna Ramírez, residente en Miami, que ha hecho también sus pinitos como actriz. La nueva pareja ha sido fotografiada en Saint Moritz (Suiza), destino habitual en vacaciones para la alta sociedad. Casi podría decirse que el casquivano multimillonario dejó a su novia española de la noche a la mañana, cambiándola por un nuevo flirt con una caraqueña.

El propio Elkann ha explicado las claves de su comportamiento con esta sentencia: «Soy un bulímico existencial». En una entrevista a la revista «Grazia» declaró que era un eterno insatisfecho: «Me despierto e imagino que no tengo nada y que debo partir de cero. El hecho es que no estoy nunca satisfecho con lo que me ofrece la vida. Esta bulimia existencial puede desconcertar».

El secreto de los éxitos que ha tenido lo explica así: «Conviene siempre tener una visión a largo plazo. Para conseguir frutos, es necesario voluntad, constancia y continuidad». Finalmente, Elkann se definía como «un empresario ecléctico al que le gustan los desafíos difíciles y complicados».

Como siempre ocurre con todo lo que hace el nieto preferido de Giovanni Agnelli, su ruptura con la bella canaria suscita interés y a nadie deja indiferente. Sus relaciones con infinidad de mujeres, lujo desenfrenado, escándalos con droga y prostitución y su vida desenfrenada han tenido siempre eco en los medios. La revista «Vanity Fair» lo consideró en cuatro ocasiones el hombre mejor vestido del mundo y el «Wall Street Journal» elogia sus invenciones de moda y diseño.

A veces sus polémicas extravagancias han irritado. El escritor Andrea De Benedetti lo ataca con dureza: «Lo único que ha inventado son unas gafas de mil euros». Un día abandonó su deportivo Ferrari sobre las vías del tranvía en Milán, desencadenando cierta indignación popular. Su vida de excesos alcanzó el ápice en octubre del 2005, cuando tuvo que ser hospitalizado en el hospital de Turín por una sobredosis de cocaína y heroína, después de pasar una noche con cuatro transexuales. A propósito de abusos, especialmente clamorosa fue su revelación de haber sido víctima de abusos sexuales a los 13 años en un colegio de jesuitas.

Lapo Elkann, el segundo mayor accionista de la automotriz Fiat, vuelve al primer plano de la actualidad en su faceta habitual: como coleccionista de mujeres y noviazgos con récord de brevedad.

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