José Luis Martínez Almeida, el «aguirrista» que convenció a Cifuentes

José Luis Martínez Almeida (Madrid, 1975), nuevo portavoz del PP en el Ayuntamiento, representa los nuevos aires con los que el nuevo PP de Madrid pretende abordar la regeneración. También próximo a Aguirre y actual portavoz de la comisión de Desarrollo Urbano Sostenible en el Consistorio, destaca entre los ediles del PP por su perfil directo y crítico, en ocasiones incluso socarrón. Un abanico de ciualidades con las que logró ser el candidato «oficioso» del aparato del PP de Cristina Cifuentes.

Abogado del Estado, fue director general de Patrimonio Histórico de la Comunidad entre 2007 y 2011; y secretario general del Consejo de Gobierno de la Comunidad entre 2011 y 2013. Fuera del terreno político no oculta su pasión por el fútbol.

En su perfil de Twitter, el sucesor de la expresidenta regional, se define como «muy del Atlético de Madrid».

A sus 40 años dejó a un lado su carrera para ocupar la bancada popular en el Consistorio de la mano de Esperanza Aguirre, como número tres de su lista, asumiendo el área de Desarrollo Urbano y el distrito de Moratalaz.

Ágil en el debate, Martínez-Almeida ha logrado arrastrar al barro al delegado José Manuel Calvo en los vivos debates mantenidos por ambos en la Comisión de Desarrollo Urbano Sostenible, donde las peticiones de silencio y respeto por parte del presidente han sido el pan de cada día. El hoy ya portavoz del PP en el Ayuntamiento de Madrid ha alzado en innumerables ocasiones las banderas del adiós a la Operación Chamartín, el 'culebrón' del Edificio España o los cooperativistas de Cuatro Caminos para intentar ridiculizar el modelo urbanístico de Podemos.

Ante cada acusación de corrupción, Martínez-Almeida ha salido firme en la defensa de sus compañeros de partido, e incluso logró que la comisión de urbanismo madrileña guardase un minuto de silencio el día del fallecimiento de la valenciana Rita Barberá. Ágil y de carácter afable, el hoy portavoz del grupo asumió el reto de representar al PP en las comisiones de investigación que el Ayuntamiento de Madrid creó para indagar en la gestión de los gobiernos de Alberto Ruiz-Gallardón y Ana Botella.

Bocanada de aire fresco

La decisión de Martínez-Almeida de presentarse ahora al relevo de Esperanza Aguirre, «personal» aunque meditada con compañeros, remite a dos razones fundamentales. La primera, explicó, porque Madrid «merece un cambio de Gobierno»: «Nos quedan dos años para que Madrid vuelva a ser del PP». Y, la segunda, en un claro guiño a los ediles que decidirán esta semana, porque «hay un extraordinario equipo».

En contraposición con el pasado de Henríquez de Luna, claramente «aguirrista», Almeida irrumpe como un rostro nuevo, acaso cargado del aire fresco con el que el partido quiere regenerarse. No obstante, José Luis Martínez Almeida también se ubicaba en el bando próximo a Esperanza Aguirre.

Preguntado por esta cuestión, si de verdad es el rostro que busca el PP, el hasta ahora portavoz de la comisión de Urbanismo eludió hace días la etiqueta: «Lo que importa es la imagen del PP. No estamos ante una situación fácil y debemos centrarnos en nuestra labor de oposición, que en estos dos años ha sido incansable».