La «guerra» en el PP regional por la fecha del congreso

Algo tan aparentemente inocente como la fecha de celebración del congreso regional del PP -los días 17, 18 y 19 de marzo- ha vuelto a abrir la caja de los truenos en la sede madrileña de esta formación, donde subyace una guerra latente cuya última batalla aún no se ha librado. El detonante ayer fue la declaración del concejal madrileño Íñigo Henríquez de Luna, asegurando que la presidenta de la gestora en Madrid, Cristina Cifuentes, había acordado con la dirección nacional del PP una fecha de celebración que hace «casi imposible» competir. Será, dijo, un «congreso exprés».

De acuerdo con su explicación, el congreso no se convocará formalmente hasta que se celebre, coincidiendo con el Congreso Nacional, el Comité Ejecutivo del partido, el 12 de febrero.

Eso supone 44 días hasta la cita regional, y una eventual candidatura competidora con la de Cifuentes -que ni él ni su entorno, asegura, promoverán- apenas tendría nueve días para hacer campaña.

«Soplar o sorber»

La fecha del congreso regional se conoce desde el pasado 11 de enero, y también se celebrará en ese mismo fin de semana los congresos de Andalucía y Murcia. La propia Cifuentes salió al paso de estas críticas, al preguntarse: «¿Dónde está el problema para presentarse si todos los candidatos van a tener el mismo tiempo?». Está convencida de que «si se hubiera escogido un fin de semana posterior para celebrar el congreso, habría gente que lo criticaría», y recordó que «hubo personas» que «reclamaban que ese congreso se celebrara lo antes posible», para que se acabara la interinidad de la gestora que dirige el PP en Madrid desde que Esperanza Aguirre dejó el cargo, el 14 de febrero de 2016. «Lo que valía entonces vale ahora: o soplar o sorber», remarcó.

Será, insistió, «la primera vez en la historia del PPde Madrid en que todos los militantes podrán elegir a su presidente». Ella anunciará si se presenta como candidata a presidir el PP de Madrid el 13 de febrero, 24 horas después de que finalice el congreso nacional. Ese mismo día, si finalmente es candidata, abandonará la presidencia de la gestora porque no quiere que nadie piense que hará «una utilización interesada de los medios y jugará con ventaja», atajó.

La crítica de Íñigo Henríquez de Luna recibió el respaldo de otras personas del partido, como los responsables del PP en Puente de Vallecas -encabezado por la exdiputada nacional Eva Durán-. Esta agrupación popular presentará al congreso nacional enmiendas para evitar que se puedan recortar los plazos para los congresos regionales, y no descartaba incluso impugnar la convocatoria de marzo en Madrid porque consideraba que «la gestora del PP en Madrid vulnera los derechos democráticos de los afiliados».

Proponen un periodo mínimo de 90 días entre la convocatoria del congreso y su celebración. También señalan que celebrar este encuentro en pleno «puente» de San José, cuando «todo el mundo se va», es señal de que la gestora «no quiere que haya alternativa».

Respuestas en tromba

Pero la postura de Henríquez de Luna -hombre de confianza de Esperanza Aguirre desde hace muchos años, aunque en su entorno niegan que ella esté detrás de esta operación- recibió la respuesta en tromba de una docena larga de dirigentes locales del PP madrileño, que se manifestaron desde sus municipios y desde varios distritos de la capital a favor de la fecha del congreso y de que éste se celebre bajo la premisa «un militante, un voto» que ha promovido Cifuentes.

Concretamente, se manifestaron a favor de celebrar el congreso en marzo - «cuanto antes», para acabar con la «situación de interinidad» en el partido- desde las direcciones del PP en Móstoles, Pinto, Valdemoro, Pozuelo de Alarcón, o Fuenlabrada, y desde los distritos de Barajas, Vicálvaro, San Blas o Retiro.

En Nuevas Generaciones de Madrid también apoyaron que el congreso fuera en marzo: «Quien quiera presentarse sabe ya la fecha y dispondría de muchos más días para hacerlo de los que recogen los actuales estatutos». Su presidenta, Ana Isabel Pérez, aseguraba: «Es conveniente salir de situaciones de provisionalidad cuanto antes y darle la palabra a los militantes» porque «no hay nada más democrático e integrador». Piden no imitar al PSOE con «polémicas estériles» sobre fechas.