Villares: «Las críticas quedarán atrás en cuanto empecemos a trabajar»

En medio del aluvión de críticas por parte de algunos de los principales referentes de En Marea, Luís Villares restó importancia ayer a su decisión dejar fuera de la nueva dirección del partido instrumental a sectores de peso en la confluencia como Marea Atlántica o Izquierda Unida. El portavoz rupturista confía en que los reproches «quedarán atrás» una vez empiece a trabajar la nueva Ejecutiva y «desarrolle todas las tareas pendientes». El optimismo del exmagistrado contrasta con la intención de su sector crítico, que ya anunció que lejos de asumir la composición de la nueva coordinadora intentarán revocarla dentro de unos meses, en el plenario que la formación prevé celebrar este verano.

Para intentar calmar las aguas, Villares señaló ayer que la nueva dirección que él encabeza como portavoz único intentará desarrollar el proyecto político que comparte todo el espacio de confluencia, incluyendo también a aquellos sectores que no están representados en la Ejecutiva.

«No es el proyecto político de una parte sino del proyecto en su totalidad, y la totalidad incluye también el punto de vista de las personas que ahora discrepan», explicó el diputado lucense, al tiempo que defendió su decisión de desbloquear la constitución de la dirección de En Marea tras dos meses de negociaciones infructuosas. Según el magistrado en excedencia, la mayor parte de las bases de la confluencia reclamaban que el partido instrumental se pusiera «a trabajar» cuanto antes.

Carta financiera

Tras mantener su primera reunión, la dirección de En Marea anunció que en los próximos días trabajará en desarrollar la carta financiera del partido, el documento que fija las retribuciones de los cargos institucionales de En Marea y las aportaciones que deberán realizar aquellos que tengan doble militancia, como es el caso de los militantes de Podemos, Anova o Esquerda Unida. La viceportavoz del partido instrumental, Victoria Esteban, detalló que, con el objetivo de profundizar en la «transparencia» de la organización, En Marea prevé publicar en su página web dicha carta financiera, así como la situación de los distintos cargos institucionales con respecto a ella.

La obligación de los parlamentarios rupturistas de ceder parte de su sueldo fue motivo de polémica las últimas semanas, cuando el secretario de organización de Podemos, Juan Merlo, acusó a parte de los parlamentarios de la formación morada de cobrar su salario íntegro sin hacer efectiva ninguna donación. Algunos de estos diputados alegaron que desconocían qué parte de su salario debería ir para Podemos y cuál para En Marea. Un conflicto que esperan que se resuelva tras la publicación de la citada carta financiera.