El Gobierno valenciano margina a los alumnos de las universidades privadas en el reparto de becas

Los alumnos matriculados en universidades privadas de la Comunidad Valenciana no tendrán derecho a las becas que concede el Gobierno autonómico, de acuerdo con la planificación para el próximo curso del departamento que Educación que dirige el nacionalista Vicent Marzà. La medida afectará a los 3.000 estudiantes de las cuatro universidades privadas de la región.

Desde el curso 2006-2007 hasta el actual, todos los universitarios valencianos tenían derecho a beca con independencia de si estudiaban en la privada o en la pública. Si cumplían los requisitos académicos y de renta podían acceder a la exención del pago de la matrícula, a becas para sufragar sus estudios o ayudas para las estancias en los programas Erasmus.

Pese a la marginación de parte del alumnado, la Conselleria de Educación incrementará casi un 40% los fondos para las becas universitarias para el curso 2016-2017 hasta los 23 millones de euros, rebajará en todas las ayudas la nota de acceso del 6,5 al 5 y flexibilizará el criterio de renta.

Según ha informado la Generalitat, se trata de un programa de choque contra la "doble discriminación del alumnado universitario valenciano por razones económicas y académicas estipuladas por el Ministerio de Educación".

Una de las novedades de este programa son las becas Salario, una modalidad pionera en el Estado, mediante las cuales el alumnado que acceda tendrá un salario de hasta 600 euros mensuales por curso.

El presidente de Nuevas Generaciones de la Comunitat Valenciana (NNGG), Juan Carlos Caballero, ha señalado que el conseller de Educación, Vicent Marzà, "con su plan de becas fomenta la desigualdad entre los jóvenes valencianos y condena a muchas estudiantes a abandonar sus estudios".

En total, el programa de ayudas contará con casi un 40% más de fondos económicos que el año anterior; y la mayor parte de becas se convocarán entre mayo y junio de este año.

Se establece por primera vez el criterio de la igualdad de género en las ayudas, de manera que, en caso de empate en la nota, se otorgará la ayuda al alumno del sexo menos representado en la carrera solicitada.

De las ocho modalidades de ayudas preparadas, cuatro son nuevas: las becas de no-abandono, las de formación a distancia, las de formación en idiomas y las becas salario.

Las becas salario están pensadas para el alumnado que iniciará por primera vez sus estudios universitarios el curso 2016-2017.

Están adscritas a alumnado con familias que no pueden hacer frente a los gastos derivados de sus estudios universitarios.

De esta manera, el alumnado puede colaborar con su familia aportando un sueldo próximo al salario mínimo interprofesional de hasta 600 euros durante los cuatro años de formación, siempre que superen académicamente los cursos.

En estas ayudas se flexibilizan los requisitos, ya que el umbral de renta que se establece para familias de cuatro miembros es de hasta 18.000 euros y la nota mínima exigida, tanto para acceder como para renovar, es de un 5.

Para estas becas hay consignados 5 millones de euros y se estima que los beneficiarios pueden llegar al millar hasta agotar el importe.