Un grupo de periodistas contempla «Cabeza de Fauno» (1952),
Un grupo de periodistas contempla «Cabeza de Fauno» (1952), - EFE

El Minotauro, «alter ego» de Picasso

El Museo Picasso muestra la atracción que el pintor sentía por la mitología

BARCELONA Actualizado: Guardar
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En 1935 el pintor malagueño pintó en París «Minotauromaquia», ungrabado muy completo que forma parte de la colección del Museo Picasso de Barcelona. «Esta pieza es el único grabado fechado en 1935 -desvela Claustre Rafart, comisaria de la muestra «Mitologías, obra gráfica en la colección del museo» que se puede ver en la calle Montcada hasta el 19 de marzo 2017. En 1935 Picasso declaró «que el arte no le motivaba suficientemente y empezó a escribir».

Es un grabado muy importante que está considerado como un precedente del «Guernica». En el centro vemos una mujer torera con los pechos descubiertos que sugiere a Marie Thérèse Walter con quien tuvo una larga relación y a la izquierda destaca un hombre desnudo subido a una escalera que remite a la crucifixión de Cristo.

«El Minotauro le sirvió para representar su alter ego -añade Rafart-. En concreto sus pulsiones amorosas y su vigorosidad masculina».

Debutó con «Hércules»

Al minotauro se suman el centauro, el fauno, Eros y Dánae, entre otros. «Picasso tomó los mitos grecorromanos como fuente de inspiración en diferentes épocas -concreta la comisaria-. En algunos casos repetía la historia original, en otros los reinterpretaba y también los pintaba a través de los artistas clásicos como Rubens, Tiziano o Velázquez».

También podemos admirar «Hércules» de 1890, «su primer dibujo sobre mitología» o «Sexo a la antigua y a la moderna» de 1968 donde destaca claramente una menina muy escotada en lado izquierdo, como guiño a su admirado Velázquez.

Despide la exposición una sala con varias cabezas de fauno que reflejan la alegría de vivir de aquel momento, los años cuarenta, «cuando compartía su vida con François Gilot». Todos estos dibujos los realizó el mismo día.

Esta selección de piezas mitológicas podría ser el embrión de una gran mirada al Picasso mitológico. «No hay nada concreto pero sí la voluntad de enseñar los fondos de esta pinacoteca», afirma la comisaria.

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