Educación elimina el distrito único por una zonificación «más igualitaria»

En su comparecencia en la Comisión Parlamentaria de Educación de las Cortes regionales, el consejero de Educación, Cultura y Deportes, Ángel Felpeto, ha anunciado el nuevo diseño de zonificación escolar que elimina el distrito único instaurado por el Partido Popular en la pasada legislatura, que según indicó «provocó el cierre de 883 unidades escolares». El nuevo sistema de escolarización fue definido por Felpeto como más «igualitario», también «da respuesta a las carencias» y supone «un avance de igualdad y transparencia, pero respetando la libertad de elección».

Felpeto incidió en el hecho de que las condiciones para escolarizar a los alumnos tiene mucho que ver con la conciliación familiar de los padres, y que el nuevo reparto de zonas «garantiza la oferta suficiente» de puestos para alumnos, y además incluye centros tanto públicos como concertados.

Como ya se informó en su día, la presencia de hermanos en el centro a elegir, la proximidad al lugar de trabajo de los padres, la renta, la condición de familia numerosa, la discapacidad de alumnos o familiares y la condición de acogimiento son criterios puntuables a la hora de acceder a los centros educativos. «Se imponía la necesidad de dar un cierto orden al proceso, y no por motivos ideológicos. Este decreto es uno de los principales garantes del cumplimiento de la igualdad y por eso era necesario», indicó el consejero, para quien la libre elección de centro defendida por el PP «provocaba un desequilibrio en el reparto del alumnado».

Novedades del sistema

Según explicó Felpeto, las novedades de este nuevo sistema pasan por la consideración de hasta tres tramos distintos de renta de la unidad familiar, «lo que da mayor neutralidad y justicia». A eso se une el hecho de contemplar varios tipos de familia numerosa, incluir el factor de acogimiento familiar o tener en cuenta las discapacidades de la familia o del propio alumno. Además, indicó que la metodología de publicación hace «transparente» el proceso, «al tiempo que preserva la intimidad de las familias. «Y se flexibiliza el criterio de zonificación, las zonas permiten realizar ordenadamente el proceso y todos los criterios han sido aprobados por el sector», añadió.

Intentar agradar a todos

El diputado de Podemos José García Molina, habló en su intervención de los «dos pecados» de la política, «el de no agradar a nadie», del que a su juicio adolecía la antecesora en el cargo de Felpeto; y el de «intentar agradar a todo el mundo», en el que a su juicio incurre Felpeto.

Asimismo, considera que Felpeto «comparte el argumento del PP de la libertad de los padres a elegir», un extremo donde asegura no poder «dar la razón» al consejero. «Han intentado hacer un híbrido, y no sabemos si lo que quieren es zonificar los colegios públicos pero no los privados pagados con dinero público», manifestó, además de preguntar a Felpeto si el criterio de elección de centros públicos es el mismo que para centros concertados. Por eso en esta materia criticó los «dos discursos» del Gobierno regional, que por un lado «defiende la libertad de elección» y por otro «la igualdad», algo que a su juicio no puede mezclarse.

Posiciones contrarias

En cambio el diputado socialista Fausto Marín compartió los nuevos criterios de escolarización, «un planteamiento que va a conseguir que no haya hacinamiento en las aulas y acabará con los ‘guetos’ que produjo el anterior decreto». «Con ese infame decreto consiguieron no solo 883 cierres de aulas, sino que acabaron con más de 6.000 docentes en la calle», criticó.

Por contra, la diputada del PP Claudia Alonso puso el acento en que con el criterio de su partido ahora derogado, hasta el 90% de los alumnos recibían el centro que querían, mientras que ahora «será la Administración quien elija por los alumnos».

Defendió también la figura de la educación concertada, «que hace que un alumno con pocos recursos pueda ir al mismo colegio que el hijo de un presidente de la Junta». A su juicio, el hecho de cambiar el decreto se produce «por puro sectarismo». «Ustedes tienen que eliminar algo que funciona y muy bien por ideología. No creo que haya sido tan caóticas las admisiones de alumnos en los últimos años», dijo Alonso al consejero.

La diputada también criticó la puesta en marcha del decreto, que en su opinión no ha sido negociado con el sector. «Dicen que se ha hecho con participación, pero los consejos escolares municipales me dicen que no les han convocado», indicó, lamentado además que no se haya contactado con asociaciones de padres.

Además, cuestionó al consejero que el próximo curso «se eliminarán más de 300 docentes y más de 220 unidades». «Su sistema está mal ejecutado. Y están eliminando una parte fundamental, que es no ofrecer a todos las mismas oportunidades», dijo.

Al final, el consejero tomó la palabra para contestar a los grupos parlamentarios, diciendo a Podemos que su intención «no es agradar a todo el mundo», sino simplemente «escuchar a todos».