Rivera augura que el proceso independentista morirá en unas elecciones autonómicas

El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, espera que el proceso catalán «muera» en unas elecciones autonómicas ya que considera que «lo de Cataluña agota», pero ya está agotado».

Rivera, que ha visitado Málaga y ha ofrecido una ponencia en el Campus Joven de su partido, ha asegurado que lo que le fastidia es que «Cataluña lleva cinco años en un bucle» que le impide avanzar y ha recordado que se está en el mismo punto que en 2012.

«Empiezo a ver síntomas de agotamiento. Una encuesta de ellos mismos dice que están a punto de perder la mayoría absoluta los independentistas y esto es una oportunidad para que Inés Arrimadas lidere una Cataluña emprendedora y conciliadora», ha manifestado.

Ha opinado que el proceso independentista, al que ha calificado de «agotador», «acaba en las urnas, con unas elecciones autonómicas» y que el 1 de octubre «lógicamente no va a haber referéndum; eso lo saben hasta ellos».

El líder de Ciudadanos ha añadido que «estamos hasta el gorro del monotema» y ha señalado que los «mentirosos» tendrán que explicar a los ciudadanos independentistas que «Matrix no existe, que es el mundo paralelo de Puigdemont y Mas; que no existe una Cataluña independiente del mundo».

Ha criticado que en Cataluña se estén saltando las leyes y «retorciendo las normas del Parlamento», algo que «no se puede permitir».

Ha calificado de «jodido» ser revolucionario en coche oficial y ha enfatizado que «a los separatistas en Cataluña en cuanto le tocan el bolsillo se bajan del carro» e intentan hacer como Lola Flores, que cada uno ponga un euro para pagar a Mas la multa por organizar la consulta.

Por todo ello, ha señalado que lo que sucede no es una crisis en Cataluña, sino nacional: «Allí ha aflorado en la independencia, en la separación. El nacionalismo aprovecha las crisis de los Estados para intentar dinamitarlos».

Ha pedido un proyecto ilusionante, atractivo para todos los españoles, incluidos los catalanes, y ha dicho que si todo el tiempo que se ha hablado del proceso de la independencia se hubiera concentrado en educación, sanidad y en atraer empresas ahora sería el mejor lugar para trabajar y vivir.