Un joven se hace un «selfie» con Mariano Rajoy en Olmedo
Un joven se hace un «selfie» con Mariano Rajoy en Olmedo - F. HERAS

Rajoy, Sánchez y Rivera apuestan por los baños de masas; Iglesias no pisa la calle

La «nueva» política y la «vieja» no se diferencian tanto. Así hacen campaña los líderes del bipartidismo y los emergentes

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La «nueva» política y la «vieja» no se diferencian tanto, al menos en lo que se refiere a la campaña de tres de las cuatro formaciones políticas que tienen posibilidades de llegar al Gobierno. Partido Popular, PSOE y Ciudadanos, han apostado de forma decidida por «pisar la calle», buscar el voto puerta a puerta, combinándolo, además, con apariciones televisivas en programas hasta no hace mucho ajenos a la actualidad política.

Es sorprendente ver a Rajoy desenvolverse en esos baños de masas en los que parece disfrutar, cuando hasta no hace mucho era acusado de que la calle le daba alergia. No sucede lo mismo con Sánchez y Rivera, quienes desde que alcanzaron el liderazgo de su partido han buscado ese contacto directo con los electores como contraste al supuesto desapego del jefe del Ejecutivo.

La diferencia, llamativa, es Podemos, cuyo líder, Pablo Iglesias, prefiere refugiarse en los pequeños o medianos actos de partido, o en encuentros sectoriales. Su punto fuerte, sin embargo, es la utilización de las redes sociales, un campo donde esta formación ha demostrado que se mueve como pez en el agua. El mejor ejemplo fue el debate del lunes, donde los militantes supieron lanzar la imagen de que su jefe de filas había sido el ganador.

PP. Una apuesta por la cercanía y el contacto con los ciudadanos

Mariano Rajoy se ha echado a la calle. Literalmente. Su equipo de campaña y directivos de Génova como el vicepresidente Fernando Martínez-Maillo le plantearon hacer una campaña muy pegada a los ciudadanos, que cambiara los grandes mítines llenados con autobuses de simpatizantes por pequeños encuentros en plazas o parques, y mucho paseo callejero. Se trata de buscar el cara a cara con el ciudadano, porque todos saben que el presidente del Gobierno gana mucho en la corta distancia.

Lo probaron primero en Finestrat (Alicante) y otras localidades pequeñas, que durante la precampaña sirvieron como banco de pruebas de este nuevo tipo de recorrido electoral.

El resultado les gustó. Tanto, que lo han reproducido por los cuatro puntos cardinales. Hasta ahora, con buen resultado: Rajoy observa entre sorprendido y encantado cómo le reciben los vecinos estrechándoles la mano, haciéndose «selfies» y poniéndole niños en los brazos. No es de extrañar que ayer en Palma de Mallorca dijera: «Estoy contento de cómo va la campaña. Me lo estoy pesando muy bien, la gente es estupenda».

PSOE. Una maratón de actos para explotar la imagen del líder

Pedro Sánchez es la imagen de marca del «nuevo PSOE» surgido tras la marcha de Alfredo Pérez Rubalcaba y, aunque hoy está en horas bajas por el resultado de los debates electorales, su presencia constante en la calle y en los medios obedece a una cuidada estrategia que se lleva ejecutando quince meses. No es que esté en campaña desde hace una semana, es que lleva 16 meses.

De fuerte atractivo físico, ayer reconoció que tiene que ganar aún «naturalidad»; algo que sus críticos le venían reclamando al tiempo que censuraban tanta excesiva exposición televisiva. Eso no le ha impedido volver a «El Hormiguero» esta semana. Dos veces en ocho meses. Y, nada más llegar a la Secretaría General, rompió moldes protagonizando una polémica intervención telefónica en «Sálvame»; y en estas dos semanas ha acudido a un mano a mano con Bertín Osborne en horario de máxima audiencia y a «Qué tiempo tan feliz», con María Teresa Campos. El 20-D se verá si le da resultado.

CIUDADANOS. Rivera busca en la calle mejorar entre la gente de edad avanzada

El comienzo de la campaña ha estado muy condicionada, como admite el propio comité de campaña, por el debate del pasado lunes y por la celebración del acto del Día de la Constitución. Desde el martes, Ciudadanos trabaja con una estructura de campaña que sigue cada día el mismo esquema: por las mañanas Albert Rivera realiza un paseo por las calles de alguna ciudad con los dirigentes locales y regionales del partido que acaba en un mitin en la calle.

Aunque estos actos han dado pie a que Rivera se haya visto envuelto en alguna protesta, por lo general sus paseos están teniendo una gran aceptación y le están garantizando fuerte presencia en los medios locales. Además, el público con el que está dialogando Rivera en estos paseos responde a una franja del electorado que tradicionalmente se le resiste al partido: las mujeres de avanzada edad.

Por las tardes, Rivera se deja acompañar por el líder regional y el cabeza de lista del partido en cada provincia. Lo hace en un mitin al uso, generalmente en el Palacio de Congresos de cada ciudad.

No olvida el partido otro de sus puntos fuertes: las redes. Rivera participa mañana en un acto en las oficinas de Twitter para presentar una nueva herramienta de conexión con los ciudadanos.

PODEMOS. Redes sociales, entrevistas ciudadanas y mítines al uso

Podemos ha intentado plantear una campaña diferente, aunque hay «vicios» de la «vieja política» de los que no ha logrado escapar. Mítines al uso, con discursos grandilocuentes en grandes recintos y otros más pequeños, se combinan con un formato de entrevistas ciudadanas al candidato que puso en marcha en Madrid y que repetirá en otras cinco ciudades.

El «merchandising» sigue siendo un punto fuerte en el partido, que no financia la campaña con créditos y para el que cualquier fuente de ingresos es buena. Es en la financiación donde la campaña morada es la más original, con microcréditos y crowdfunding para el envío de papeletas.

Podemos coloniza también las redes sociales y es ahí donde hace su «campaña paralela», colocando sus temas entre los más comentados y dando difusión a cada intervención y acto, vía «streaming» y con comentarios de sus líderes y equipo.

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