EFE

Los inspectores del Banco de España ponen en duda el informe de Deloitte sobre el agujero del Popular

El colectivo ve poco creíble que la entidad quebrase solo por la falta de liquidez

MADRID Actualizado: Guardar
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Más sombras de sospecha en torno a la resolución del Popular. La asociación de inspectores del Banco de España ha emitido este martes un comunicado en el que pone en duda la valoración hecha por Deloitte del sexto banco del país, que cifró el agujero de la entidad entre 2.000 y 8.200 millones de euros negativos y que sirvió de base para la venta del grupo al Santander por un euro. Los representantes de los técnicos del supervisor nacional consideran ese rango de valoraciones demasiado amplio.

«Resulta llamativo que la valoración de un experto independiente establezca un rango de entre 2.000 y 8.000 millones de pérdidas, en función de los escenarios que se contemplen. Esto lleva a pensar que o los escenarios son de una diversidad extrema, o el experto no lo es tanto, o no lo es su independencia», critica la asociación.

Un equipo de unas 40 personas de Deloitte, como avanzó ABC, llevaba trabajando desde dos semanas antes de la resolución del Popular en su valoración de cara a una eventual intervención y liquidación ordenada de la entidad. La Junta Única de Resolución (SRB, por sus siglas en inglés), a través del FROB, encargó ese trabajo. La firma de auditoría y consultoría valoró la entidad en 2.000 millones negativos en un escenario base y en 8.200 en otro adverso. Fuentes financieras consultadas por este diario confirman que en estos casos estas evaluadoras suelen tirar por lo alto sus valoraciones para no quedarse cortos a la hora de cifrar el agujero contable.

Los inspectores ponen también en duda que el Popular quebrase simplemente por una crisis de liquidez, como han defendido el Ministerio de Economía y el Banco Central Europeo (BCE). «Resulta difícil de aceptar que hoy en día cualquier entidad financiera, por grande que sea, pueda verse abocada a la quiebra por un problema estrcitamente de liquidez. Y si así llega a ocurrir, sería un indicio sólido de que los garantes de la estabilidad financiera no han procedido de las manera más adecuada», critican.

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