La debilidad de la banca italiana arrastra a la Bolsa de Milán

La mayor parte de las Bolsas europeas han cerrado la primera jornada de esta semana ligeramente a la baja. A falta de referencias económicas, ninguna se ha pronunciado claramente ni por las pérdidas ni por las ganancias. Salvo una: la de Milán. Los problemas de solvencia que arrastra el sector financiero de Italia han lastrado un día más la cotización del principal índice bursátil de ese país, que ha cerrado la sesión con una caída del 1,74%.

Banco Monte dei Paschi di Siena, una de las entidades italianas sobre la que se centran gran parte de las dudas de los inversores, ha sido este lunes el farolillo rojo del selectivo transalpino al desplomarse un 13,99%, de forma que en lo que va de año ha perdido ya más de un 70% de su valor en Bolsa.

Le ha seguido Banca Popolare Emilia Romagna (-6,73%), Banco Popolare (-4,5%), Banca Mediolanum (-3,66%), Unicredit (-3,63%), UBI (-3,05%), Intesa Sanpaolo (-3,04%) y Banco Popolare di Milano (-1,4%).

La banca italiana acumula un total de 340.000 millones de euros en activos improductivos, entre créditos morosos e inmuebles y otros activos adjudicados. Esa situación ya ha obligado al Gobierno de Matteo Renzi a articular una suerte de banco malo (Atlante) con 5.000 millones, y a conceder avales al sector po 150.000 millones. La gran duda es si esas dos medidas serán suficientes para atajar un problema de solvencia que amenaza con desencadenar otra crisis financiera en la Eurozona.

Al menos en el día de hoy el resto de plazas europeas no se han visto contagiadas por esas dudas sobre el sistema financiero italiano. En una sesión marcada por la jornada festiva en la Bolsa de Nueva York, el Ibex 35 ha cerrado la sesión con una caída del 0,16%, rompiendo así la racha alcista de cuatro jornadas consecutivas de ganancias que ha registrado tras el referendo en Reino Unido sobre el Brexit. El resto de parqués europeos corrieron similar suerte: Fráncfort se dejó un 0,69%, Londres un 0,84% y París un 0,91%.