CÁDIZ

Los técnicos de Aguas de Cádiz reciben a una asamblea enfadada

Los vecinos increparon a los profesionales y les exigieron respuestas sobre el restablecimiento del servicio, el tipo de bacteria y el agua de las cubas

CÁDIZ. Actualizado: Guardar
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Sin una fecha clara a la vista para restablecer el servicio de agua ni conocimiento sobre la causa del problema, los vecinos de Loreto empezaban ayer a perder la paciencia. Con un grupo de afectados ante la puerta del Ayuntamiento y una asamblea improvisada en la plaza principal del barrio, los ciudadanos exigieron explicaciones de unos y otros. Los primeros fueron atendidos por la alcaldesa, Teófila Martínez, y los concejales Ignacio Romaní y Vicente Sánchez que les informaron a puerta cerrada sobre las actuaciones que se han venido llevando a cabo. Los segundo recibieron la visita de dos técnicos de Aguas de Cádiz que se encontraron con un panorama distinto. Conducidos por los portavoces vecinales, fueron invitados a subirse a un rebate de la plaza desde donde dieron explicaciones sobre los pasos que se han seguido ante un aforo que reclamaba más información.

Mientras se extendían rumores por los corrillos, los vecinos preguntaron cuándo volverá a restablecerse el suministro, el tipo de bacteria que se ha localizado y sobre la calidad del agua que están sirviendo las cubas. Sin tregua para los profesionales enviados por la empresa municipal, exigieron soluciones a su situación. Los técnicos se encontraron en una tesitura que dijeron no esperar. «Pensábamos que íbamos a la asociación de vecinos, a hablar de otra manera, no aquí en una asamblea en la calle», llegó a decir uno de ellos, que admitió a los vecinos sentirse como en un linchamiento sin percatarse de la presencia de los medios.

Falsos rumores

La indignación de los afectados daba pie a especulaciones hasta el punto de que algunos llegaron a asegurar que el problema se estaba extendiendo a otros barrios y había cortes también en Puntales. La bola fue creciendo y ya durante la tarde comenzaron a circular los mensajes a través del móvil y las redes sociales de sospechas en una mala calidad del agua en toda la red de abastecimiento de la ciudad, lo que generó alarma entre los ciudadanos.