Alarma económica en el Ayuntamiento de Arcos

El PSOE de Arcos ha vuelto a criticar la gestión económica que llevan a cabo PP y AiPro en el Ayuntamiento, pero esta vez acuden a un informe oficial para justificar dicha crítica. En concreto, desde el Grupo Municipal Socialista han dado a conocer un informe de la Intervención de Fondos del Ayuntamiento, fechado a finales de junio, en el que «se deja entrever la nefasta situación económica en la que se encuentra el Ayuntamiento», destacan.

La situación la vienen denunciando los socialistas desde que se solicitara el préstamo estatal para el pago a proveedores y se siguieran ejecutando obras con recursos propios que «ponen en peligro el pago de los servicios más elementales de un Ayuntamiento». El informe «no sólo deja claro que este Ayuntamiento tiene graves problemas de liquidez» con impagos a la Seguridad Social, a la Agencia Tributaria, los propios prestamos ICO solicitados para el pago a proveedores y deudas judiciales a las que hacer frente, entre otras. Además, critican que desde el Gobierno local «se hace caso omiso» a las indicaciones del propio Interventor.

El documento aclara que el Presupuesto de 2013 se liquidó con un remanente de tesorería negativo de 9.900.519.55 euros por lo que, según la Ley, «se debe de reducir este gasto del siguiente ejercicio». Además, no sólo habla de los impagos y la situación económica sino que informa negativamente de que se lleven a cabo gastos de fondos propios «sin tener certeza del momento en el que se van a liquidar muchos recursos propio». En concreto destacan conceptos como el de la Tasa de Regularización de Viviendas o el del proyecto de la finca el Postuero, por los que asegura que no se está ingresando nada.

El interventor accidental, que aprovecha su informe para solicitar que se nombre a un interventor nacional habilitado para que «informe con criterio superior», recuerda en el mismo que «los recursos propios se deben de destinar prioritariamente a gastos ordinarios de personal y servicios básicos municipales». Destacando también que «hasta que no estén cubiertos esos gastos ordinarios, no se deben de dedicar fondos a la financiación de inversiones».