Imagen del pasaporte pintarrajeado subida a las redes sociales por el padre del niño. :: R. C.
25 aniversario | plaza de Tiananmen

Atrapado por un garabato

Retienen en un aeropuerto de Corea del Sur a un ciudadano chino cuyo hijo pintarrajeó su pasaporte en pleno vuelo

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Un hombre de nacionalidad china ha tenido que recurrir a las redes sociales para pedir ayuda al quedar retenido en un aeropuerto de Corea del Sur después de que su hijo de corta edad decidiera garabatear durante el viaje el pasaporte de su progenitor. Y es que las autoridades chinas deben estar estos días desbordadas con todas las medidas de seguridad y despliegues policiales por el 25 aniversario de la masacre de las plaza de Tiananmen y no deben tener mucho tiempo para preocuparse por el pasaporte de uno de sus 1.300 millones de súbditos.

Todo ocurrió durante un viaje familiar a Corea del Sur. Una vez superados los nervios y sensaciones del despegue, de ver desde el aire las nubes, las casas, los coches y los ríos, de patear el asiento delantero y de tirar al suelo las revistas, la bolsa para el mareo y el plano para evacuar el avión, el pequeño de cuatro años estaba comenzando a desmadrarse.

El padre y la madre debían de estar ya hartos de su retoño, por lo que le ofrecieron el bolso de mano para que jugara con las pertenencias. Grave error. Allí, el niño encontró otro filón de objetos para desperdigarlos por debajo de los asientos. Entre las cosas identificó dos objetos familiares, lo que parecía un cuaderno y un bolígrafo, algo con lo que se entretiene en la escuela, en casa o cuando visita a los abuelitos. Tras abrirlo observó que había muchas páginas en blanco, pero en una de ellas había una fotografía de su papá. Sin más dilación comenzó a adornar esa página llena de aburridas letras y escudos que el no conocía.

Con gran creatividad, y al ancho de las dos páginas, dibujó unos montes y un cielo sin nubes pero con un sol digno de los mejores tiempos cubistas de Picasso. Junto a los arbolitos y las hierbecitas, el niño garabateó lo que parece un perrito. En la otra página, donde estaba la foto de su papá, pintó varios borrones, otro perrito, pero dejó para el final lo mejor, la imagen de su progenitor. A la foto de más tamaño le puso unos grandes ojos, unos gruesos labios y lo que parece una gran melena y barba. Había otra foto del padre más pequeña, en la que sólo hizo unos pequeños retoques estéticos.

Descubierto por los padres, el pequeño fue reprendido y todos esperaron que el librito, que en realidad era el pasaporte del hombre, pudiera pasar por el control aduanero. Sin embargo, las autoridades coreanas estimaron que el titular del documento estaba «irreconocible», por lo que no les quedó más remedio que retenerlo en el aeropuerto a la espera de que los responsables de la Embajada de China en Seúl confirman su identidad.

Ante la tardanza, el padre, de nombre Chen, publicó la imagen de su pasaporte en la red social china Weibo, a la espera de que le ayuden cuanto antes para poder regresar de vuelta con su familia. Pese a que en China hay censura, la imagen del pasaporte pintarrajeado ha dado la vuelta al mundo.