Apuntes

Un escándalo político por omisión

Las denuncias de Marta Meléndez dejan claro que puso en conocimiento de todos sus superiores unas presuntas y graves faltas administrativas sin que hicieran nada

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Como siempre sucede en política, ahora llegarán los que miran el dedo. Los que buscarán las motivaciones del denunciante, los que calculan qué pierden o ganan con sus palabras, qué busca ella. Pero los ciudadanos sin afiliación a ninguna formación tienen otras prioridades. Se trata de aclarar si lo que cuenta Marta Meléndez es cierto. Y, si lo es, por qué nadie hizo nada durante tanto tiempo. La que fuera portavoz municipal socialista en la capital gaditana y última candidata a la Alcaldía es la que decide romper el silencio al que parecen obligados todos los representantes públicos. No es un cargo cualquiera, fue la cara del PSOE en Cádiz para tratar de arrebatar el bastón de mando a Teófila Martínez.

Y es ella la que afirma que detectó graves irregularidades en el organismo, ISE, en el que trabajaba, ese que es el encargado de obras y mantenimiento de todos los centros educativos. Advirtió de que había serias dudas sobre el manejo de dinero público. Se lo dijo a la consejera de Educación y al delegado de esta Consejería en Cádiz, al máximo representante de la Junta en la provincia. Y nadie hizo nada. Bien al contrario, la mandaron callar. Se lo comunicó a otros responsables del partido y tampoco hubo la menor reacción.

Este relato, que debe ser demostrado como cierto y está en manos de la Justicia, presenta a un PSOE que protagoniza un escándalo político por omisión. Saber de unas posibles negligencias con el dinero de todos y no hacer nada es mucho más grave que sufrirlas en una estructura por las malas prácticas de alguna persona concreta. En este caso, no existe además el anestésico que supone escuchar una denuncia política llegada de la formación oponente. Esta vez es una persona que comparte siglas con los denunciados pero parece poner por delante, por una vez, el interés común, el colectivo y ciudadano antes que el del partido. Ojalá otros muchos siguieran su ejemplo a la mayor brevedad.