Una campaña récord para el aceite

Una campaña récord. El sector de la aceituna de la provincia está desplegando el telón sobre el campo para recoger las aceitunas que están a punto de madurar en los centenarios olivos serranos. En total, Cádiz cosechará este año unas 77.029 toneladas de aceitunas y esto le permitirá producir unas 13.865 toneladas de aceite, un 81,97% más respecto a la temporada pasada y un 85,03% más que la media de los últimos años, según los datos elaborados por los técnicos de la Consejería de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural y que forman parte del Aforo de Andalucía para la campaña 2013-2014.

La estimación de cosecha para Andalucía es superior a los 6,2 millones de toneladas de aceitunas para molturar, que generarán más de 1,3 millones de toneladas de aceite de oliva. Esto supone que la comunidad seguirá siendo la mayor productora de España y del mundo, ya que en todo el Estado se generan unos 1,6 millones de toneladas de aceite y en el mundo unos 3 millones. En cuanto a la producción de aceite, la Agencia del Aceite de Oliva de Andalucía destaca que ascenderá en la región andaluza un 32% respecto a la media de las cinco últimas campañas, reduciéndose un 3,76% en comparación con 2011-2012, el último año que se considera normal tras la bajada de la temporada anterior, cuando descendió un 60% con respecto a un año considerado normal.

En la provincia, la recuperación de la producción de aceite ha sido mucho mejor de la media andaluza, ya que este año llegará casi a triplicarse con respecto a la última desastrosa campaña. En la recogida de 2012 y 2013, los campos gaditanos sólo produjeron 23.677 toneladas de aceituna que generaron 4.705 toneladas de aceite. El rendimiento del fruto este año es algo menor, ya que se necesitarán casi 5,6 kilos de aceituna para dar un litro de aceite, frente a los 5,0 del año pasado, aunque eso no evitará que la producción se recupere.

Esta mejora de la campaña se debe a que al contar la anterior con una producción muy baja, se ha favorecido al aumento de la floración, el cuajado y la fructificación. A esto se han unido las condiciones meteorológicas favorables, con ausencia de heladas intensas en invierno, lluvia abundante, buenas temperaturas durante la floración y un buen estado hídrico.

El olivar andaluz cuenta actualmente con un millón y medio de hectáreas, una extensión que supone el 30% de la Superficie Agraria Útil de la comunidad autónoma y alrededor de un tercio de la superficie productiva de la agricultura andaluza. Las cerca de 170.000 explotaciones agrarias dedicadas a esta actividad son en su mayoría (75%) menores de diez hectáreas, ascendiendo a 820 el número total de almazaras de la región. El sector del olivar genera 23 millones de jornales al año y el valor de su producción supera los 2.200 millones de euros.

En Cádiz, el olivar no tiene nada que ver con el de provincias como Jaén y Córdoba y cuenta con unas características muy peculiares que, al mismo tiempo, le hacen poco competitivo. En la provincia, las localidades donde se concentran la producción y donde están instalados los principales productores son Algodonales, Olvera, Setenil y Alcalá del Valle, zonas de montaña con olivares imposibles de mecanizar y olivos centenarios que no dan un gran rendimiento. Además, sólo son pequeñas explotaciones familiares que no generan un gran volumen de jornales ya que los propios propietarios se encargan de recolectar las aceitunas.

En toda Andalucía se espera que se generen 23,5 millones de jornales pero el olivar gaditano sólo aporta un 1,2% de la producción total, lo que hace que estos resultados no sean un gran revulsivo laboral. No obstante, son muchos los vecinos de la comarca serrana que tratarán de participar en las campañas de recogida de Jaén, Córdoba y Sevilla, entre otras. El olivar de Andalucía y la molturación de las aceitunas genera el 40% de todas las peonadas anuales que es capaz de generar el campo andaluz.

Estimaciones

Todas estas previsiones de la citada Consejería son estimaciones que se realizan después de estudiar un 30% de las explotaciones de la comunidad. No obstante, la producción final se podría ver alterada en función de las condiciones meteorológicas de los próximos meses y del desarrollo de la campaña.