El bingo del trabajo

Cuarenta vecinos de Torrijos, una localidad de unos 13.000 vecinos a 30 kilómetros al oeste de Toledo, pueden dar gracias a la bola de un pequeño bingo casero que les ha permitido conseguir un empleo público, con un contrato de seis meses, en su propio pueblo. Ha sido el sistema elegido por el Ayuntamiento de la localidad para cubrir 40 puestos de trabajo de albañil, jardinero, peón de mantenimiento, agente medio ambiental, electricista o auxiliar administrativo.

Cerca de 200 aspirantes se presentaron a esta selección de personal y tuvieron que hacer cola ante la sala municipal donde se realizaba el sorteo con la mirada y la esperanza puestas en el bingo de juguete. Previamente, tuvieron que indicar el oficio preferido y demostrar estar empadronado en el pueblo y en situación de parado. Como Juan, uno de los seis jardineros seleccionados. «Tengo un hijo y, por lo menos, podré ingresar algo en casa», dice agradecido. Con la misma sonrisa y de la misma opinión es Antonio, uno de los 16 candidatos a albañil que ha logrado una de las dos plazas que ofrecía el Ayuntamiento: «Tengo 38 años y tres hijos y en mi casa no entra un sueldo desde hace meses».

Esta oferta pública de empleo por sorteo no ha gustado a CC OO, que ha decidido impugnarlo en los tribunales y comunicar estos hechos a la Delegación del Gobierno de Castilla-La Mancha, «porque el procedimiento elegido ha sido caciquil, denigrante y claramente ilegal e inconstitucional», según José Luis Arroyo, secretario provincial de la Federación Provincial de Servicios a la Ciudadanía. «Ni antes ni después se han hecho públicos los criterios de selección para ocupar estos puestos por los que cobrarán el salario mínimo», lamentó el sindicalista, para quien «no se puede dejar al simple azar un derecho como es el acceso al empleo público».

El principal defensor de esta idea, el alcalde de Torrijos, el popular Juan José Gómez-Hidalgo, se defendió de estas críticas. «Nuestra intención es poner un granito de arena para llevar a efecto el artículo de la Constitución según el cual toda persona tiene derecho al trabajo», aseguró. «Lo que debería hacer CC OO es luchar para que se aumente el salario mínimo esté quien esté en el Gobierno. Nuestra prioridad es el fomento del empleo y la promoción económica», señaló Gómez-Hidalgo en un discurso más propio de las campañas electorales.

El alcalde no solo tiene en su contra a CC OO sino también al PSOE, que criticó la celebración de este sorteo. Mientras sindicatos y partidos se enzarzan, los afortunados elegidos en este sorteo binguero se les comunicó que «ya os llamaremos» para empezar a trabajar en las próximas semanas. Todo gracias al azar.