El proyecto de Pascual sepultaría otros planes de desarrollo

El macroproyecto anunciado esta semana pasada por el empresario José Manuel Pascual ha causado un gran revuelo en la provincia porque centra la atención en uno de los principales problemas de Cádiz, la necesidad de generar empleo a través de la reactivación de la actividad económica. La oferta de esta empresa dedicada al sector sanitario –que ahora pretende expandirse hacia otras actividades como la hostelería– para salvar el hospital de San Carlos (haciéndose cargo de la plantilla y la deuda de mantenimiento del edificio), comprende también una serie de compensaciones basadas en la cesión de parcelas que como explicó su representante, José Manuel Pascual, se «encuentran en manos muertas». Es decir, que llevan años sin desarrollarse. Todo ello bajo la premisa de que no hay oportunidad de negociación y si no entran en el acuerdo los terrenos que pide, se caería todo. Pascual se ofrece así como el empresario que recupere para la ciudadanía espacios en desuso, pero no deja margen para que retoquen sus planes anunciados.

Pese a la afirmación del empresario, en algunos casos ya se está cerca de cerrar un desarrollo o se ha avanzado pasos de cara a cambiar la dinámica de unos suelos que actualmente están desaprovechados y que tanto para Cádiz, como para San Fernando, se convierten en los únicos terrenos con los que cuentan para revisar sus modelos de ciudades y buscar una salida no sólo al sector turístico, sino también al industrial y, como no, para cubrir la deficiencia en determinados equipamientos.

El mejor ejemplo es el antiguo campo de tiro de Janer, donde Pascual quiere colocar el nuevo hospital y que espera convertirse en un futuro polígono industrial. Tras años de problemas como consecuencia de los retrasos del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de La Isla, al fin se va a cambiar el uso del suelo para que sea compatible con la actividad industrial. En total son 60.000 metros cuadrados que Defensa venderá por seis millones de euros a Zona Franca. Ahora se trabaja en su ordenación. Lo primero que le preocupa al Ayuntamiento isleño es la construcción allí de una subestación eléctrica ante el déficit energético que presenta la ciudad. Ya se han iniciado contactos y negociaciones en las que también participa el Consorcio de la Zona Franca para que pueda hacer realidad ese proyecto.

Además, allí se quiere destinar naves para la industria, un edificio de oficinas e incluso se está negociando con una importante firma hostelera para la construcción de un hotel. Además desde el Consistorio se está trabajando para ubicar allí la estación de autobuses de la que carece actualmente San Fernando al situarse su puerta de entrada justo en el intercambiador del tranvía.

En cuanto a los polvorines de Fadricas, donde iría el complejo hotelero más ambicioso de 1.000 habitaciones, aún está pendiente del desarrollo de su plan de sectorialización. Aún se desconoce cómo se organizará y las últimas noticias del Ayuntamiento es que sobre la mesa hay tres posibilidades que se están estudiando. En cuanto a datos, sólo se conoce la intención del anterior Gobierno para construir más de 1.750 viviendas y espacios para equipamientos, industria y, como no, hoteles.

En cuanto al Campo de las Balas, la alcaldesa de Cádiz ya ha anunciado que saldrán a subasta pública al igual que ha ocurrido con otros terrenos de Cádiz.