Imagen de la fachada de la delegación de mujer, en la calle La Rosa. :: C. R.
Chiclana

80 víctimas de violencia de género fueron atendidas entre junio y julio

La delegación municipal de Mujer señala que estas cifras suponen un incremento del 100% con respecto a los cinco primeros meses del año

CHICLANA. Actualizado: Guardar
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El balance hecho público por la delegación municipal de mujer relativo a los meses de junio y julio revela que fueron atendidas un total de 540 personas, de las que 80 (casi el 15%) fueron mujeres que habían recibido malos tratos, tanto físicos como psíquicos.

Por meses, en junio fueron atendidas 266 mujeres, el 14 % de ellas acudieron porque habían sido víctimas de malos tratos. En lo que se refiere a julio, de las 274 consultas atendidas, el 15% estaban ligadas a este tipo de violencia machista. Estas cifras suponen un incremento de casi el 100% con respecto a los cinco primeros meses del año, donde el porcentaje de malos tratos se situaba en torno al 8% de los casos atendidos.

Según el mismo documento, en lo que va de año son más de 210 los casos atendidos por violencia masculina. En este sentido, la delegación de Mujer interviene «de forma integral, cubriendo las necesidades psicosociales de las víctimas, de manera que participan todos los departamentos, centrando todas nuestras energías y esfuerzos en dar una respuesta completa a estas personas».

Además, éste área municipal se coordina con las fuerzas y cuerpos de seguridad y los dispositivos sanitarios para que las afectadas sean atendidas sin tener que experimentar la victimización secundaria, que se produce al ir pasando por distintos departamentos teniendo que revivir los hechos.

En relación a los datos, la responsable del área, Ana Bertón, declaró que es necesario «seguir trabajando activamente por un cambio de actitudes en toda la sociedad, para que cada vez haya más hombres comprometidos en el reto de la igualdad, de forma que podamos erradicar esta lacra social». Bertón reiteró que la sociedad entera debe «hacerse partícipe del rechazo hacia comportamientos que atentan contra los más elementales derechos humanos».