El acusado, ante el tribunal que lo iba a juzgar ayer. :: ANTONIO VÁZQUEZ
CÁDIZ

Acepta un año y nueve meses por descargar pornografía infantil

La Fiscalía pedía de partida cinco años para un joven de La Isla que cayó en una macroredada internacional contra la distribución de este tipo de material

CÁDIZ. Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Tiene solo 23 años, dos más que cuando fue detenido en su casa de San Fernando por agentes del Cuerpo Nacional de Policía. Llegaron hasta él a través de la dirección IP de su ordenador, la cual fue identificada como una de las 1.668 que habían compartido material pornográfico con menores como protagonistas. La investigación, que nació en Brasil, se extendió por todo el mundo y Juan Antonio M. S. fue uno de los detenidos. Ayer iba a ser juzgado en la Audiencia Provincial, pero la vista oral se cerró con un acuerdo entre las partes y el pronunciamiento de una sentencia 'in voce' en la sala. El procesado admitió la autoría de los hechos y a cambio obtuvo una rebaja considerable de la pena que solicitaba de partida la Fiscalía.

El Ministerio Público había fijado en su escrito de acusación una condena de cinco años por un delito de pornografía infantil, pero finalmente acordó con la defensa un castigo de un año y nueve meses. El abogado de Juan Antonio M. S. pidió de forma automática al tribunal que se suspendiera la ejecución de la pena ya que su cliente carece de antecedentes penales. Al tratarse de un castigo no superior a los dos años y no ser un delincuente reincidente, la Fiscalía no se opuso a ese ruego que permitirá al joven eludir la entrada en prisión. Para agilizar el trámite, la presidenta del tribunal de la Sección Primera pidió la hoja histórico penal para verificar ese dato.

El ahora condenado aceptó el relato de hechos que exponía en su escrito el Ministerio Fiscal. En él se detalla que los agentes que realizaron un registro en su vivienda se incautaron del disco duro del ordenador que utilizaba y dos discos compactos. Si bien gran parte de la información almacenada en el equipo informático había sido borrada, los especialistas del Cuerpo Nacional que analizan estos dispositivos pudieron recuperar una parte. Así descubrieron un vídeo de una menor mostrando sus partes íntimas «junto a 676 archivos de imagen» de similar temática y también con adolescentes como protagonistas. En algunas de esas fotos, según detallaba el fiscal en su escrito, se veían prácticas sexuales explícitas.

En los dos DVDs que también fueron requisados en la casa, la Policía halló más material de las mismas características, el cual había sido compartido a través de un conocido programa de intercambio de archivos. Esa red de contactos entre servidores sirven a los especialistas en delitos tecnológicos para identificar a los pedófilos que pululan por la Red.

El abogado defensor tenía previsto esgrimir que el material que se le intervino a su cliente fue descargado cuando aún era menor de edad, pero finalmente no fue necesario al no celebrarse la vista oral.