La insalubridad obliga a suspender las clases en varios colegios desde hoy

Ya no pueden aguantar más. En torno a media docena de colegios de la ciudad interrumpirán las clases entre hoy y mañana debido a la falta de higiene derivada de la huelga de limpieza. De todas formas, estén abiertos los colegios o no, son ya muchísimas las familias jerezanas que han optado esta semana por no llevar a sus hijos a clase para preservarlos de las malas condiciones que presentan las instalaciones.

El CEIP Federico García Lorca fue el primero ayer en tomar la decisión de suspender la actividad aunque solo aplicará esta medida para los alumnos de Educación Infantil, los más afectados por la insalubridad. «La inspección sanitaria dice que existe riesgo para los alumnos», explicó el director del centro, Javier Cordero, pocos minutos después de decidirlo. «Es una causa de fuerza mayor. Nuestra única intención es salvaguardar la salud de los niños», insistió el responsable con pesar. Tal y como adelantaba LA VOZ, ayer fue el último día que los alumnos de 3, 4 y 5 años asistieron a clase hasta que termine la huelga de la plantilla de Limasa.

En el colegio de La Marquesa han seguido el mismo camino. Ayer comunicaron a las familias a través de SMS que el centro interrumpe las clases a partir de hoy para todos los alumnos, es decir, para Infantil y los tres primeros cursos de Primaria: más de 300 niños. Este centro también recibió la visita de la inspección de Sanidad y fue entonces cuando la dirección decidió atajar la situación. En este colegio la asociación de madres y padres ya había tomado la iniciativa de aconsejar a las familias mediante cartelería que no llevaran a sus hijos a clase.

El CEIP Alcazaba es el tercero de los colegios jerezanos que echa el cierre, aunque no lo ejecutará hasta mañana. «El centro no está apto para los niños, según han dicho los de Sanidad», explicó la presidenta del AMPA, Silvia Partida. La dirección del centro ha optado por dejar el día de hoy de margen para que todas las familias lo sepan -aunque ya han mandado una circular- y para que puedan organizar la logística familiar. Será a partir del jueves cuando se interrumpa la actividad lectiva. «Si no hay solución antes del jueves, se cierra», indicó la portavoz.

La decisión del CEIP Alcazaba se basa en que «las clases no están en condiciones. Ya hay niños con infecciones y gastroenteritis», continuó. Los servicios mínimos acudieron ayer a este colegio de La Granja aunque, según el AMPA, se limitaron a echar lejía en los inodoros. Y lo hicieron poco antes del recreo por lo que los niños no pudieron acceder al baño en ese tiempo. En su circular, los responsables del colegio se muestran «conscientes» del problema que el cierre puede acarrear a las familias pero destacan que se trata de la salud de los niños.

Además de estos tres, otros colegios han pospuesto su decisión al día de hoy. Es el caso de La Unión, uno de los colegios más grandes de la ciudad (tiene cuatro clases por curso), que celebrará hoy un Consejo Escolar para debatirlo.

También esperará hasta hoy la dirección del CEIP Andrés de Ribera, donde sí se están cumpliendo los servicios mínimos a juicio de sus responsables. Lo más sucio, como en el resto de los colegios, son las dependencias de Infantil por lo que, si la situación no cambia, hoy realizarán los trámites oportunos para interrumpir las clases a partir de mañana jueves.

Hay que recordar que los colegios prestan un servicio público y no pueden cerrar a cal y canto. Solo se interrumpen las clases y su personal está obligado a atender a los usuarios que así lo requieran, como recordaron desde la Delegación Provincial de Educación.

En el CEIP Manuel de Falla, por otra parte, van a ser los padres los que decidan si dejan en clase a los niños o no después de comprobar en persona el estado de las aulas. El cálculo del AMPA del centro, presidida por Lola Martín, calcula que el absentismo de hoy entre los alumnos de Educación Infantil puede rozar el 90%.

Manifestaciones

Desde principios de esta semana los padres se están organizando para protestar y tomar medidas respecto a la huelga. A primera hora de la mañana de ayer fueron los del CEIP El Retiro los que se concentraron a las puertas del centro, al que acudió un 30% menos de alumnado del habitual. Dado que las circunstancias no han cambiado, volverán a reunirse hoy junto a las pancartas que han colocado en la valla del recinto escolar.

También en Las Granjas son los padres los que desde el primer momento están emprendiendo acciones. La primera decisión fue la de no llevar a los niños al colegio ni hoy ni mañana en señal de protesta. Para esta mañana han convocado una manifestación en la que irán disfrazados con bolsas negras y con pancartas en las que se podrá leer 'La educación no es basura'. La manifestación partirá a las puertas del centro y terminará en la Ciudad de los Niños porque, ya que no van a clase, «nos vamos a llevar a los niños al parque», dijo con ironía la presidenta del AMPA, Esther Palomeque. Todas las asociaciones de padres de la zona Este acordaron ayer en una reunión otras medidas de protesta entre las que se encuentran el envío de una carta al Defensor del Pueblo y una concentración el viernes en la plaza del Arenal.

El colegio Las Granjas, que atiende a 800 niños, es uno de los más preocupantes. Según su director, Juan Guerra, «los servicios mínimos vinieron el viernes y solo limpiaron los baños cuando está estipulado que también tienen que retirar papeleras y limpiar las aulas», dijo. La situación, en palabras del responsable, «es desesperante. El colegio está para cerrarlo», aseguró.

Mucho peor

Aunque la Delegación Provincial de Educación aseguró el lunes que el estado de los colegios no era alarmante, en el comunicado que enviaron ayer sí constataron que «el paso de tan solo un día más de huelga hace que la situación haya empeorado de manera notable».

A juicio de la administración provincial, «los servicios mínimos -que no se están cumpliendo- se están mostrando claramente insuficientes pues se limitan casi de forma exclusiva a la limpieza de inodoros, mientras que en los centros se acumulan basuras orgánicas que no son retiradas en días».

También aludieron a la responsabilidad del Consistorio, que tiene las competencias en materia de limpieza de colegios públicos: «Cuesta comprender la impasibilidad del Ayuntamiento jerezano ante un conflicto que afecta a más de 14.000 niños y que se prolonga ya durante casi una semana», dijeron.

Más servicios mínimos

El incumplimiento o la realización a medias de los servicios mínimos son la queja más repetida de los colegios y de las familias y el principal motivo de que algunos de ellos interrumpan las clases a partir de hoy. En vez de un trabajador por centro durante las ocho horas de su jornada laboral, lo que ha estado funcionando desde el pasado miércoles eran cuadrillas de varios empleados que se distribuían para varios colegios. En algunos casos, como han denunciado desde los propios centros escolares, las limpiadoras solo permanecían durante una hora en el recinto y no siempre a diario.

Según confirmaron ayer fuentes de las trabajadoras, los servicios mínimos tendrán a partir de hoy lo que estipula la ley, después de que el Ayuntamiento haya denunciado ante las Delegaciones de Empleo y Educación los «reiterados incumplimientos». Si la limpieza mejora en los centros, es probable que haya muchos colegios que finalmente no tengan que interrumpir su actividad por falta de higiene.

Ayer mismo el Consistorio emitía un comunicado en el que exigía a la Junta de Andalucía que se implique en garantizar los servicios mínimos. La delegada de Educación y Juventud, Lidia Menacho, denunció la «pasividad» y la «irresponsabilidad» de la administración autonómica al no exigir el cumplimiento de los servicios fijados por la Dirección General de Trabajo. El Ayuntamiento ha decidido abrir un expediente sancionador a la empresa concesionaria, Limasa, si no cumple con la ley ya que esta situación está provocando que hoy haya centros educativos abocados al cierre». Menacho señaló que «se trata de una situación extremadamente grave en la que todos somos corresponsables de garantizar el derecho a la educación, que debe ser también compatible con el derecho a la huelga, siempre que se establezcan unos servicios mínimos acordes con la situación y que estos se cumplan».

La concejal explicó que a lo largo de la mañana de ayer no se obtuvo respuesta de la Junta a las cartas enviadas ayer exigiéndole el cumplimiento de los servicios mínimos. En su opinión, «esto demuestra una falta de interés por solucionar un problema tan importante como es garantizar la salubridad y el derecho a la educación, dando la espalda a sus responsabilidades como autoridad laboral».

La plantilla de Limasa elevó ayer su queja ya que «todo el mundo puede denunciar y nosotros ¿qué? ¿Siempre nos toca perder a los mismos?», se preguntaron. Son ya cuatro nóminas las que se les adeudan a las empleadas, que llevan meses arrastrando retrasos en los cobros. Confirmaron su intención de continuar con la huelga hasta el viernes y lamentaron que «en Jerez la gente esté tan callada con la de conflictos que hay».

Otro de los temores que las familias han expresado a este periódico es que sea a finales de semana, cuando se acerque la jornada electoral, cuando las administraciones sean más contundentes para evitar que no se pueda entrar en los colegios para votar por insalubridad mientras que ahora son los niños los perjudicados por el delicado conflicto laboral.