Más de seis años de apuesta cultural, donaciones e incluso apoyo al jerez

Desde noviembre de 2004 hasta ahora, la Fundación Teresa Rivero ha trabajado a un ritmo frenético para contar con una sede emblemática y reconocible en el centro de la ciudad y para ir calando en una sociedad a la que ha aportado proyectos culturales, ayudas económicas a ONG, asociaciones o hermandades y la promoción tanto de la localidad como de su producto más conocido, el vino.

Son múltiples los ejemplos de apoyo a iniciativas culturales, entre las que se puede destacar el primer libro editado por la institución, el de Fátima Ruiz de Lassaletta sobre 'Casas señoriales, bodegas y sabores de Jerez'. Eso sin olvidar exposiciones o cursos de fotografía, certámenes de pintura como Paleta de Colores o concursos literarios.

Pero uno de los aspectos en los que más ha destacado es en el benéfico, ya que ha hecho aportaciones a todo tipo de colectivos, como fue el caso de la ayuda que prestó a la Iglesia de Santa Ana para su reparación, la financiación de la fachada del Comedor del Salvador o las habituales donaciones a Cáritas de grandes cantidades de alimentos en épocas en las que este organismo se encontraba con la sequía de sus habituales benefactores. Incluso cada una de las 36 cofradías recibió en 2007 un total de 6.000 euros, lo mismo que le ocurrió al Obispado en 2006 cuando le donó 60.000.

Pero el premio gordo se lo llevó casi al inicio de su andadura el sector del vino de Jerez, al que anunció que aportaría seis millones de euros para una campaña genérica de promoción desligada de Garvey.