El presidente del Instituto de la Empresa Familiar Isak Andic, durante una intervención pública. :: EFE
Economia

La empresa familiar propone contratos fuera de convenio para jóvenes

El dueño de Mango pide un convenio de aprendizaje exento del pago de cotizaciones a la Seguridad Social

MADRID. Actualizado: Guardar
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Sensibles a los estragos que el paro hace entre los jóvenes -en España el desempleo juvenil supera el 40% y duplica la media europea- los empresarios ponen sobre la mesa soluciones, que de nuevo pasan por abaratar el coste de contratar. El Instituto de la Empresa Familiar (IEF) propuso ayer crear un nuevo contrato de aprendizaje, exento de pagos a la Seguridad Social y acotado en el tiempo. Su presidente, Isak Andic (dueño de la textil Mango), pidió además que el sueldo a percibir por esos aprendices no esté sujeto a las rigideces que marcan los convenios, sino que pueda 'pactarse' entre el empresario y el trabajador.

La propuesta forma parte de un plan más ambicioso para fomentar el empleo juvenil del IEF, organización sin ánimo de lucro que agrupa a un centenar de empresas con una facturación media de 1.000 millones de euros, equivalente en términos agregados al 17% del PIB, según sus propios cálculos.

Además del contrato de aprendizaje, Andic quiere que el Gobierno «bonifique» durante dos años «el 100% de las cuotas a la Seguridad Social para la contratación de jóvenes sin experiencia». Y para los menores de treinta años que opten por el autoempleo, pidió una exención total del pago de cotizaciones el primer año, y del 50% el segundo. En principio, su propuesta no incluye el compromiso del empleador de proporcionar un puesto estable al joven agotados el período de formación o los dos años de cuotas «bonificadas».

El informe incorpora un decálogo de propuestas de acción en los ámbitos fiscal, laboral, educativo y de la administración pública para luchar contra el desempleo juvenil, problema que Andic definió como «una hipoteca para el futuro». «De la respuesta que le demos hoy dependerá nuestra competitividad y el modelo social del futuro», aseguró.

El estudio del IEF detalla que el coste, medido en términos económicos y de tiempo, de incorporar a una empresa a empleados sin experiencia laboral «suele ser sensiblemente superior al de contratar a trabajadores con experiencia». Existe, recalca el documento, una «importante brecha entre la productividad que pueden aportar los jóvenes -generalmente baja, dado su escaso nivel de conocimientos prácticos- y los costes de su empleo, muy elevados en comparación con lo que pueden aportar en su puesto de trabajo».