Lecciones de lehendakari

El lehendakari López, secretario general del PSE-EE, reconoció ayer en el Foro ABC que hay matices que diferencian a los socialistas vascos en relación a la ejecutiva federal del PSOE en el tema Sortu, al tiempo que subrayaba su negativa a recibir «lecciones» al respecto dictadas a «500 o 1.000 kilómetros». Aunque, llegados a este punto, los «matices» a los que se refirió el lehendakari reflejan un clima de confusión dentro de la familia socialista o una seria división de pareceres. Aunque Patxi López dijo no compartir la crítica formulada la víspera por Jesús Eguiguren en cuanto a la falta de valentía de Rodríguez Zapatero, insistió en que «no se pueden poner condiciones nuevas a Sortu cuando nos convenga», en directa alusión a unas declaraciones del presidente en las que este consideraba la desaparición de ETA requisito imprescindible para inscribir la nueva marca de la izquierda 'abertzale' como formación legal. En sentido estricto no se trata de una condición nueva, puesto que era una de las dos opciones que el Gobierno, por boca del vicepresidente Rubalcaba, formuló ya hace meses para la legalización de la izquierda 'abertzale'. Las demandas presentadas por la Abogacía del Estado y por el Fiscal General dan a entender que el Ejecutivo no reconoce en los estatutos de Sortu la otra salida, la de una ruptura clara con ETA. El debate público y el que se mantiene en el seno del socialismo precede a las deliberaciones del Tribunal Supremo como una diatriba imposible de silenciar en una sociedad democrática. Pero sería importante que los protagonistas de tal discusión reiterasen, junto a sus respectivas posturas, su clara disposición a aceptar la decisión de los tribunales como razón última en el Estado de derecho. El lehendakari López se expresó ayer con su franqueza habitual. Pero que trate de mantener una valoración propia de los acontecimientos en relación al futuro de la izquierda 'abertzale' no debe llevarle a referirse tan despectivamente a las críticas formuladas desde lejos de Euskadi, olvidando que el terrorismo es una lacra que afecta a toda España y esgrimiendo la indiscutible autoridad moral de los socialistas y populares vascos como si se tratara de un argumento unívoco en relación al futuro de la izquierda 'abertzale'.