Los comercios de la zona de Bahía Mar se asociarán para pedir servicios

Los empresarios e inversores del centro comercial Bahía Mar y de su entorno quieren fundar una asociación para reclamar servicios al ayuntamiento como la mejora de la accesibilidad de los clientes. En este sentido, pedirán que el gran puente que cruzará el Guadalete permita el paso de todo tipo de vehículos y no solo del transporte público y de residentes.

Los comerciantes de esta zona, que a la crisis generalizada han sumado el perjuicio por la feroz competencia de las nuevas superficies comerciales de Jerez -Ikea y Luz Shopping-, consideran «imprescindible» que el puente se ejecute lo antes posible a fin de superar el «aislamiento» y favorecer que los portuenses acudan a estas tiendas -centradas en las 'grandes compras', menaje, decoración, deportes...- en lugar de salir de la ciudad para evitar atascos y ahorrar tiempo. «Con la ausencia del puente estamos perdiendo 1.500 puestos de trabajo». Álvaro Taboada de Zúñiga, inversor con varias propiedades en este parque comercial, aseguró que este cálculo se corresponde solo con los despidos que se han producido en los últimos meses -desde dependientes, administrativos hasta el personal de limpieza-, y no con las tiendas que se podrían instalar en los metros libres que quedan. Ahora, con el cierre de Kiabi y Menaje del Hogar también quedan inmuebles disponibles. Pero los empresarios ya no encuentran apetecible este punto de la Bahía y uno de los motivos es el acceso desde la margen derecha del Guadalete. La única posibilidad para los que vienen desde el centro, Zona Norte, la Costa Oeste... pasa por tomar la rotonda de Pozos Dulces. Sin embargo, el gran puente, sobre el que no existe fecha de inicio de obras, partirá desde la futura plaza de la Pescadería, una zona peatonal. El proyecto se integra en el Plan de Movilidad que pretende favorecer el transporte público y el acceso al centro.

Precisamente en breve comenzarán las obras de la primera pasarela peatonal, desde la avenida de Europa -con unas dos mil plazas de aparcamiento- hasta el parque Calderón. Algo que a juicio de Taboada de Zúñiga y de Claudia González, representante de Bahía Mar, no solucionará su problema. «Nos parece bien que lo hagan. Pero aquí sobran aparcamientos. Lo que hay que conseguir es que la gente venga aquí además de al centro. Porque nuestra tipología comercial es distinta, no somos competencia».