La primera fase de la terminal de contenedores sale a licitación

La Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz (APBC) está acabando el año rodeada de buenas noticias. Si su presidente, Rafael Barra, ya se mostraba satisfecho, a principios de semana, con el aumento de cruceros que han hecho escala durante 2010 en la ciudad, ayer sumaba otra alegría con la publicación de licitación de la nueva terminal de contenedores en el Boletín Oficial del Estado.

Se trata de una de las obras más emblemáticas del puerto, tanto por su envergadura como por su cuantía, que contribuirá a mejorar su competitividad y a conseguir una buena situación en el tráfico de mercancías, pata en la que ha cojeado -aunque levemente- este año. La obra, que tendrá un plazo de ejecución máximo de 46 meses con una entrega parcial establecida en 34 meses, cuenta con un presupuesto base de 90.025.614 euros, de los cuales 54 millones los aporta los fondos Feder de la Unión Europea.

La primera fase del proyecto se centra en el dique de Levante, en el extremo del puerto donde antes se encontraba la planta Delta, y en el muelle número 5, ubicado dentro de la concesión de dominio público portuario a Navantia Cádiz. Lo que se pretende con esta inversión es ganarle al mar algo más de 19 hectáreas mediante un relleno, una actuación parecida a la que ya se ha realizado en el muelle Marqués de Comillas con la ampliación de la plataforma para la mercancía rodada (Ro-Ro). Además de las hectáreas ganadas al mar, el nuevo espacio tendrá 598 metros lineales de muelle y 16 metros de calado.

Estos terrenos, de 93.747 metros cuadrados de superficie terrestre, han sido recibidos por la Autoridad Portuaria con la correspondiente desclasificación como suelos contaminados de la Dirección General de Prevención y Calidad Ambiental de la Junta de Andalucía.

Desde la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz resaltaron que esta obra responde a un triple objetivo. De un lado, hará posible trasladar el actual tráfico de contenedores a una zona mejor posicionada dentro de Cádiz, lo que evitará ruido y tráfico pesado por el centro urbano. De otro lado, la nueva terminal estará preparada para poder acoger a los grandes buques portacontenedores lo que mejorará, sin duda, la competitividad del puerto gaditano ya que hasta ahora estaba vedado el paso a aquellos barcos con más de 10,50 metros de calado. Por último, hará factible la construcción de una estación marítima con una tercera terminal de pasajeros de cruceros en las instalaciones donde actualmente se manipulan los contenedores en el muelle Reina Sofía.

La APBC hizo especial hincapié en que esta nueva infraestructura está planteada con la finalidad de minimizar su impacto ambiental sobre el entorno. Ni los recursos naturales, ni el Parque Natural, ni el patrimonio arqueológico, sufrirán alteraciones en sus valores o en sus procesos claves.