El presidente del PP explicará a Merkel y Sarkozy su rechazo al ajuste de Zapatero

Mariano Rajoy tendrá la oportunidad de explicar a otros líderes europeos de centroderecha los motivos por los que se ha opuesto a las medidas de ajuste llevadas a cabo por José Luis Rodríguez Zapatero a petición de la Unión Europea y de otros organismos internacionales. El líder del PP acudirá hoy a la cumbre de los populares europeos celebrarán en el Castillo de Bouchout de Bruselas. No hay ningún encuentro bilateral previsto, pero Rajoy coincidirá en esta reunión-cena con la canciller alemana Angela Merkel, el presidente francés Nicolás Sarkozy y el primer ministro italiano Silvio Berlusconi, entre otra treintena de representantes de esta familia política.

Rajoy ya ha expresado mediante conversaciones telefónicas con varios dirigentes del Partido Popular Europeo que apoya de forma absoluta la necesidad de reducir el déficit público en España, pero insisten en que esta medida no debe recaer en los pensionistas. Por eso se opuso al decreto-ley que las congeló. Fuentes del PP han negado, sin embargo, que gobernantes como Merkel o Sarkozy hubiesen presionado a Rajoy para que al menos se abstuviese en la votación con la que el Congreso convalidó el plan de ajuste de Zapatero.

Rajoy se desplazará a Bruselas tras protagonizar un nuevo cara a cara con el presidente en la sesión de control al Gobierno y pocas horas después de que el Ejecutivo apruebe el decreto con la reforma laboral, que al ser tramitada como proyecto de ley podrá recibir las enmiendas de otros grupos durante su tramitación parlamentaria. De momento, el PP rechaza el modelo que Zapatero ha puesto encima de la mesa.

La estrategia del PP, entretanto, sigue levantando críticas entre los miembros del Gabinete socialista. El ministro de Fomento y vicesecretario general del PSOE, José Blanco, acusó ayer a Rajoy de tener como objetivo «acelerar la crisis para provocar una situación de emergencia nacional». Todo, añadió el ministro de Fomento, «para llegar a la Moncloa, hacer un ajuste de caballo y echar la culpa a otros».

El número dos de los socialistas insistió en señalar al presidente del PP como el «mayor activista de toda Europa en pro del descrédito de España». Aseveró, incluso, que el PP en general y su líder en particular «han hecho lo posible para desgastar la imagen del país frente a los mercados de capital».