Laboral Kutxa se deshace en el último cuarto y cae ante Panathinaikos

El Laboral Kutxa se esfumó de la pista en el cuarto final y entregó el partido a Panathinaikos, que conquistó con un 64-72 el Buesa Arena en la segunda jornada del Top 16 de Euroliga.

Seis nefastos minutos del Baskonia en el periodo definitivo y un parcial de 4-17 condenó a los de Sergio Scariolo de cualquier opción de amarrar el partido. Arrancaron con un esperanzador 52-48 los vitorianos, en el minuto 30, pero la dirección de Diamantidis y los triples de Curry, Fotsis y Bramos dispararon a los griegos, 56-65 a falta de los cuatro minutos finales.

Laboral Kutxa no pudo contar finalmente con Lamont Hamilton por una lesión en el talón y su ausencia debilitó la batería interior. Más desguarnecida quedó aún con la segunda falta de Pleiss en el minuto cuatro que obligó a poner en pista al joven Diop. Panathinaikos hurgó en la falta de envergadura con la dirección de Ukic y los puntos en la pintura de Gist y Lasme. Un parcial de 0-8 rompió el cuarto y le permitió alcanzar el minuto diez con un cómodo 17-24. Los de Scariolo pudieron frenar el ritmo del equipo griego y llevaron el partido a unos marcadores ajustados y con mínimas rentas sin lograr superar al conjunto heleno que llegó al descanso con una mínima renta, 32-34.

Los vitorianos ofrecieron su mejor versión en la reanudación. Blindaron su aro durante cuatro minutos para conceder un tiro libre y anotar nueve puntos que les dieron el mando, 41-35 minuto 24. Reaccionaron los griegos con los puntos en la zona de Lasme y Gist, 43-43, pero la buena dirección de Heurtel, la sempiterna intensidad de Nocioni y un triple postrero de David Jelinek desde medio campo pusieron a los locales 52-48 en el minuto 30.

Se atascó Laboral Kutxa en siete minutos del acto final mientras los helenos encontraron en los triples de Curry, Fotsis, Bramos y un excelso Diamantidis a los estiletes de un parcial de 4-17 con el que abrieron brecha, 56-65, y cimentaron el triunfo. Intentó a la desesperada voltear el marcador pero Panathinaikos manejó con solvencia los minutos finales para rescatar un importante triunfo en el pabellón vitoriano.