Un hombre habla con un soldado francés durante la operación de desarme en Bangui. / Afp
intervención militar

La Haya alerta de abusos graves y deterioro de la seguridad en República Centroafricana

Francia desarma ya a las milicias del país tras desplegar 1.600 efectivos, que se unirán a los 3.000 enviados por otros Estados africanos

PARÍS / BRUSELAS Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

La Fiscalía de la Corte Penal Internacional (CPI) ha advertido del deterioro de la seguridad en la República Centroafricana y ha subrayado que aumentan los asesinatos, los actos de violencia sexual y el reclutamiento de niños soldado. La fiscal general del alto tribunal de La Haya, Fatou Bensouda, ha expresado su preocupación por la situación en el país y "los graves crímenes que allí se estarían perpetrando", según un comunicado de prensa. "El deterioro de la seguridad en estos últimos días no ha hecho sino amplificar delitos graves en el país, en especial asesinatos, violencia sexual y reclutamiento de niños soldado", ha precisado Bensouda, quien ha agregado que "la situación se agrava cada día y miles de civiles huyen de la violencia".

La fiscal general de la CPI ha recordado que los crímenes de guerra, contra la humanidad y el genocidio son competencia de la Corte Penal Internacional. "Insto a todas las partes implicadas en el conflicto, y en especial a los antiguos miembros del grupo Séléka y de otras milicias, a que cesen los ataques contra la población civil y de cometer delitos, o se arriesgan a ser investigados por la fiscalía de la CPI", ha advertido Bensouda. Asimismo, ha subrayado que "las peticiones de las víctimas de estos delitos no se van a ignorar".

El Consejo de Seguridad de la ONU aprobó por unanimidad el pasado jueves una resolución de intervención internacional en ese país, donde los enfrentamientos entre diferentes milicias se cobraron 400 muertos, según la Cruz Roja. La crisis comenzó el pasado 24 de marzo, cuando Bangui fue tomada por los rebeldes del grupo Séléka, que asumieron el poder en el país y derrocaron al presidente François Bozizé, quien se ha exiliado.

La fiscal general de la CPI saludó los esfuerzos de la comunicad internacional y su apoyo a las fuerzas de paz internacionales, que cuentan con el apoyo de la ONU y de la Unión Africana y en las que Francia actúa como coordinador de otros países. Ha añadido que esa presencia contribuirá a estabilizar la situación de seguridad en el país y poner fin a la violencia. Bensouda también mostró su satisfacción por la apertura de una investigación sobre las violaciones de los derechos humanos cometidos en la RepúblicaCentroafricana desde principios de 2013.

Inician el desarme

Mientras tanto, en el terreno, militares galos han comenzado a desarmar a las milicias en República Centroafricana, donde Francia ha desplegado 1.600 uniformados para apoyar a los 3.000 efectivos enviados a ese país por otros Estados africanos en la misión internacional MISCA, ha informado el Estado Mayor. Por su parte, el ministro francés de Exteriores, Laurent Fabius, ha subrayado en declaraciones a 'France Intern' que la dificultad del desarme pasa por identificar a los partidarios del grupo Séléka, que "se han quitado sus uniformes y se han vestido de civiles". "No es un trabajo fácil, pero nuestros militares son muy profesionales y están muy preparados", ha señalado.

Los militares franceses han explicado a la población centroafricana a través de los medios de comunicación que deben desarmarse. "Y si no es suficientemente eficaz, se empleará la fuerza", ha agregado Fabius, quien ha minimizado el impacto económico de la operación para París porque los militares galos empleados se encontraban ya en países vecinos. Según el jefe de la diplomacia gala, la no intervención rápida hubiera supuesto el riego de "salir aún más caro".

Desde el pasado jueves, el mismo día que el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas aprobó por unanimidad una resolución de intervención internacional en República Sudafricana, los enfrentamientos entre diferentes milicias se cobraron 400 muertos en ese país, según la Cruz Roja. La crisis de la República Centroafricana comenzó el pasado 24 de marzo, cuando Bangui fue tomada por los rebeldes de Séléka, que asumieron el poder en el país y derrocaron al presidente, François Bozizé, que se exilió.