El ministro alemán del Interior, Hans-Peter Friedrich. / Nicolas Bouvy (Efe)
EUROPA ANTE LA CRISIS

Un ministro alemán, contra el acceso de parados europeos a los subsidios germanos

"Las condiciones de vida y los ingresos medios en Europa muestran diferencias notables", señala Hans-Peter Friedrich, rsponsable de Interior del país

BERLÍN Actualizado: Guardar
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El ministro alemán del Interior, Hans-Peter Friedrich, se ha pronunciado este sábado en contra de la incorporación de los desempleados europeos al sistema social y subsidios germanos, con el argumento de que no hay una armonización a escala de la Unión Europea (UE) de prestaciones. "Las condiciones de vida y los ingresos medios en Europa muestran diferencias notables", ha apuntado el ministro, en declaraciones al diario 'Rheinischen Post', en alusión a una reciente sentencia que reconocía a una familia rumana el derecho a percibir subsidios en Alemania.

"La entrada en vigor de esa sentencia está claro que tendrá un efecto llamada", añadió Friedrich, de la Unión Socialcristiana de Baviera (CDU), quien en declaraciones recientes se había postulado por una política restrictiva respecto a la inmigración procedente de Rumanía y Bulgaria. El pasado jueves, la justicia del estado federado de Renania del Norte-Westfalia reconoció el derecho a percibir las ayudas como desempleados crónicos a ciudadanos europeos con residencia estabilizada en Alemania.

El dictamen se refería al caso de una familia de cuatro miembros procedentes de Rumanía y no es una sentencia en firme, sino que está sujeta a un posible recurso. Hasta ahora, a los ciudadanos de la UE recién llegados a Alemania y sin empleo no se les reconocía el derecho a percibir este tipo de ayudas.

"La Comisión Europea debe procurar que los medios procedentes de distintos fondos europeos estén a disposición también de Bulgaria y Rumanía", apunta Friedrich, para quien ésta debe ser la modalidad de ayuda prevista para mejorar las condiciones de vida de los gitanos en sus países de procedencia.

Friedrich representa al ala más conservadora de la CSU, partido hermanado a la Unión Cristianodemócrata (CDU) que preside la canciller Angela Merkel. Los pronunciamientos del ministro en favor de una política restrictiva de inmigración han merecido duras críticas de la oposición socialdemócrata y verde, los dos socios potenciales de la CDU/CSU para la formación de su nuevo gobierno.