El soldado Bradley Manning. / AFP
'CASO WIKILEAKS'

Un psiquiatra recomendó que Manning no fuese aislado

El capitán Hoctor señaló que cuando el informático llegó a Quantico venía bajo "riesgo de suicidio"

WASHINGTON Actualizado: Guardar
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El capitán de la Armada William Hoctor, uno de los psiquiatras que trató al soldado Bradley Manning, acusado de filtrar miles de documentos a WikiLeaks, recomendó a sus superiores que el soldado no fuera aislado durante su estancia en la prisión de Quantico (Virginia), donde estuvo nueve meses. Manning, que fue arrestado el 27 de mayo de 2010 en Irak y trasladado temporalmente a una base en Kuwait, fue internado en el centro penitenciario de Quantico (Virginia) en julio de ese año, donde estuvo en prisión preventiva hasta abril de 2011, momento en que fue trasladado a la prisión de Fort Leavenworth (Kansas).

El capitán Hoctor señaló que cuando Manning llegó a Quantico venía bajo "riesgo de suicidio" algo con lo que, dijo, estuvo de acuerdo en ese momento, porque, según indicó, protagonizó un par de incidentes en los que trató de hacerse daño con un objeto metálico y mostró tener pensamientos suicidas.

No obstante, aseguró que su evaluación médica cambió con el paso de las semanas basándose en las entrevistas que mantuvo con Manning, y el 6 de agosto envió el primer informe a sus superiores en el que consideraba que se podían rebajar las medidas de seguridad al soldado porque no corría riesgo de suicidio. Bajo ese régimen de máxima vigilancia, Manning -que escuchó atento y en silencio el testimonio de su psiquiatra- estaba totalmente aislado, no se le permitía hacer ejercicio ni salir al patio y por la noche se le quitaban las gafas y se le obligaba a dormir desnudo.

El capitán aseguró que durante sus visitas a Manning en las dos semanas posteriores a su llegada no detectó inclinaciones suicidas, tenía buen comportamiento y subrayó que el hecho de que alguien haya estado en riesgo de suicidio no significa que vaya a cometerlo. Hoctor, que definió a Manning como una persona "impulsiva" con tendencia "depresiva" que tenía "algunas dificultades de carácter", se opuso a que fuera aislado de los demás presos porque podría causar "frustración", "irritabilidad" y "ansiedad" al soldado.

El psiquiatra también se opuso a que se le prohibiera hacer deporte porque consideró que la salud también implica ejercicio y cuando transmitió su petición a sus superiores fue denegada porque "estaba en contra de la regulación". "Estar 24 horas en la celda es confinamiento, no son medidas de precaución para evitar suicidio", subrayó el psiquiatra, quien expresó su "frustración" porque las recomendaciones que hizo en los meses sucesivos, pese a sus más de veinte años de experiencia, no se tuvieron en cuenta.

Cadena perpetua

Para más seguridad, el capitán corroboró su valoración con el coronel Rick Malone, también psiquiatra, ya que, según explicó en Quantico, estaban "muy preocupados por la seguridad" debido a la "gran cantidad de atención" al caso, y quería mitigar esas inquietudes. El coronel Robert Oltman, el entonces jefe de seguridad del centro de detención, quien le precedió en la palabra, subrayó durante su testimonio que estaban centrados en la seguridad de Manning, ya que meses antes se había suicidado otro preso al que Holtor había rebajado la categoría de riesgo.

Oltman señaló que la opinión del psiquiatra no le ofrecía "total credibilidad" y era "sólo uno de los datos" entre otros factores a tener en cuenta, como los informes semanales de los guardas. Manning, de 24 años, está acusado de 22 cargos, el más grave el de ayudar al enemigo, por el que podría ser condenado a cadena perpetua. Su defensa trata de demostrar que fue tratado injustamente durante su estancia en prisión preventiva en Quantico, por lo que considera que se debería desestimar la petición de los fiscales de que se le aplique cadena perpetua