Dimiten la directora del museo Thyssen de Málaga y su principal patrono

Antes de que el flamante museo Carmen Thyssen de Málaga cumpliera su primer mes de vida se ha quedado sin directora. María López Fernández ha tirado la toalla y ha presentado su dimisión. Denuncia, sin más precisiones, el "incumplimiento de determinados pactos" que figuraban en su contrato, que no le dejan trabajar y que las injerencias de la baronesa y el alcalde de Málaga hacen insostenible su situación.

Una denuncia que tiene bastantes visos de verosimilitud, ya que en el mismo viaje y por las mismas causas abandonaba su puesto el historiador y crítico de arte Tomás Llorens, principal asesor y miembro del patronato de la pinacoteca malacitana y conservador jefe del Museo Thyssen Bornemisza de Madrid durante casi tres lustros.

En sus cartas de dimisión dirigidas a Carmen Cervera y la alcaldía y al resto de patronos de la fundación Palacio de Villalón que gestiona el museo, Llorens y López denuncian "injerencias permanentes en su trabajo artístico por parte de la baronesa y del alcalde de Málaga", el popular Francisco de la Torre Prados. La renuncia de ambos fue aceptada por el ayuntamiento malacitano.

Tanto Fernández como Llorens han reconocido, sin embargo, que se les solicitó que ante la proximidad de las elecciones municipales y autonómicas del 22 de mayo aplazaran su decisión. La directora y el patrono, historiador y catedrático de arte, no han querido permanecer un día más en su responsabilidad y se han desvinculado del proyecto que inició su andadura el pasado 23 de marzo en el recuperado palacio de Villalón.

El detonante de la renuncia de la directora y el principal patrono hay que buscarlo en el cambio de estructura aprobado en la reunión del patronato del 23 de marzo. Según la carta de dimisión de Llorens, en aquella reunión a la que no pudo asistir se decidió "convertir el puesto de director previsto en el organigrama en director artístico, y atribuir a un gerente responsable ante el patronato las principales funciones ejecutivas del museo". A juico del historiador y crítico de arte, con decisiones de este porte el museo de Carmen Thyssen "ha dejado de tener el grado de credibilidad histórico-artístico que debería esperarse de un museo de su naturaleza".

Relegado

Llorens asegura en su escrito de dimisión que "de modo discrecional y sin proceso de selección alguno" se designó como gerente a una persona que "carece de experiencia en la gestión de museos o instituciones artísticas, cuya ocupación profesional exclusiva a lo largo de los últimos años ha sido de naturaleza política". A juicio de Llorens la decisión es "un síntoma claro de la voluntad del Patronato de relegar en su gestión las cuestiones histórico artísticas a un nivel secundario".

Tomás Llorens ha jugado un papel crucial en la instalación y desarrollo de la colección del barón y de Carmen Thyssen en España. No en vano fue conservador jefe del museo madrileño durante 14 años, cargo al que accedió tras haber sido subdirector del Reina Sofía.