Operarios trabajando en la calle Virgili este viernes.
Operarios trabajando en la calle Virgili este viernes. - L.V.
URBANISMO

La reurbanización de Viudas y Virgili acumula ya un mes de retraso

Las obras, que arrancaron en abril y deberían haber finalizado el pasado 26 de octubre, se prolongarán hasta la segunda semana de diciembre

CÁDIZ Actualizado: Guardar
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Los vecinos del entorno de la plaza de las Viudas y la calle Virgili de Cádiz no tienen más remedio que llevar con el talante que les queda las eternas obras de reurbanización que están afectando a ambas vías de la ciudad. Muchos de los residentes ya han hecho suya una expresión tan gaditana como «va a durar más que la obra de la Catedral» y la razón les asiste, pues los trabajos que arrancaron a finales del pasado mes de abril deberían haber finalizado, según informaban desde el Ayuntamiento de Cádiz, el pasado 26 de octubre. No obstante, según comentan a pie de obra, la empresa que está llevando a cabo los trabajos no tiene previsto dar de mano hasta la segunda semana del mes de diciembre.

Durante este tiempo, la ejecución de los trabajos se ha visto perjudicada por imprevistos relacionados con las deterioradas redes de instalaciones que se encontraban soterradas. No obstante, la luz se atisba al final del túnel y la plaza de las Viudas ofrece ya una imagen bastante aproximada a la que lucirá cuando finalice su reurbanización. En este sentido, las aceras ya han desaparecido y se han colocado palmeras, macetones y los postes para las nuevas farolas que iluminarán este paseo semiapeatonal en el que el tráfico de vehículos quedará restringido a los usuarios de garajes en el tramo de las calles Navas y Benjumeda.

Desde hace un par de semanas, los operarios están centrando sus trabajos en el tramo de la calle Virgili que va desde la propia plaza de Viudas hasta la plaza de Fragela, que es la vía que se está viendo más afectada en el tramo final de una actuación que contempla la repavimentación y eliminación de barreras arquitectónicas.

Aunque la fase de la obra más comprometida para los residentes, con la entrada y salida constante de maquinaria pesada y continuos cortes al tráfico entre las calles adyacentes, prácticamente ha finalizado, las quejas siguen estando presentes en el barrio. Muchos vecinos, como Conchi, asumen que la reforma de la plaza y sus calles cercanas va a dar más vida a la zona, pero lamenta que «no sé cuantas veces he tenido que ir ya a hacerle la compra a mi madre, que es mayor y no puede salir de casa –situada en Virgili– por culpa de las obras». Y es que los ancianos y las personas con movilidad reducida son las que peor están llevando esta situación durante los últimos seis meses.

Otro de los vecinos que tiene su vivienda en la propia plaza de Viudas saluda que los trabajos hayan llegado casi a su final, pero se mostraba bastante critico con el ritmo al que, por momentos, se han llevado las obras. «La he visto desatendida durante algunas fases. Y te lo digo yo que me he comido tres meses con la calle levantada y problemas para entrar en mi casa. Ahora les está tocando a los de Virgili», explicaba este residente que prefería no dar a conocer su nombre y que también apuntaba a la «falta de control por parte de la Policía Local» en la plaza ante «la cantidad de coches que siguen aparcando junto a los portales e impidiendo el paso a los vecinos».

Cabe recordar que estos trabajos, que cuentan con una inversión de 525.000 euros, forman parte del Plan Urbana, con el que se financian proyectos para el desarrollo urbano sostenible de los barrios de San Juan, la Viña, el Balón y el Mentidero. Una iniciativa que busca la regeneración económica y social de la zona e incrementar la calidad de vida de sus habitantes.

Así las cosas, tanto esta actuación como las que se están llevando a cabo en las calles Solano y Vidal y en la plaza Cañamaque está previsto que estén listas en torno al 10 de diciembre.

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