Costas arregla el sendero entre Cortadura y Torregorda para el uso de peatones y ciclistas

El subdelegado del Gobierno en Cádiz, Javier de Torre, y el jefe de la Demarcación de Costas de Andalucía Atlántico, Patricio Poullet, han visitado este jueves una actuación realizada por Costas entre los términos municipales de Cádiz y San Fernando, consistente en un sendero para el tránsito peatonal y ciclista entre Torregorda y Cortadura.

Según ha indicado la Subdelegación en una nota, De Torre ha señalado que «con esta obra se da respuesta a una importante demanda de la sociedad gaditana». Así, a partir de Torregorda hay un carril afectado y usado por la depuradora que se encuentra en condiciones ordinarias para su utilización como continuación natural del sendero, «sin necesidad de otras actuaciones».

Las obras, desarrolladas a lo largo de dos meses por Costas y con un importe de 56.507 euros, han consistido en la rehabilitación del firme existente de zahorra natural mediante escarificado (disgregación de la superficie del terreno y su posterior compactación para homogeneizar la superficie) en unas zonas y aporte de nuevo material donde se precisaba, para su posterior extendido, nivelado y compactado.

Se han habilitado en ambos extremos del camino, en Cortadura y junto a la Casa salinera, limitadores de acceso mediante vallas que permiten el paso peatonal y de bicicletas. También habilitan el acceso para casos de emergencia o vigilancia de la costa, colocándose sendas cancelas para permitir en su caso la entrada de vehículos.

En el extremo de Cortadura se han eliminado restos de antiguos carteles, tres de prohibición y tres informativos, así como otros residuos existentes en este punto y en el resto de la traza.

El istmo que une la ciudad de Cádiz con San Fernando discurre a lo largo de unos 3,5 kilómetros, con una anchura media de 200 metros. A lo largo del istmo, flanqueados al oeste por playa característica atlántica con sistema dunar estable y por el este con las marismas de la bahía de Cádiz, discurren multitud de infraestructuras y servicios, entre los que se encuentran la autovía N-IV, la línea doble de ferrocarril Cádiz-Madrid, líneas eléctricas, conducciones de abastecimiento, colectores de pluviales, etcétera.

Dadas las características citadas, no era posible el tránsito peatonal o ciclista desde la ciudad de Cádiz por tierra firme, salvo por la propia playa.

La obra de Costas adecua un antiguo camino provisional de servicio construido por ADIF que, tras la finalización de las obras de duplicación de la vía, fue entregado, al ser Dominio Público Marítimo Terrestre, a la Demarcación de Costas.

Transcurrido el tiempo, y debido al uso frecuente y no autorizado de tráfico de vehículos por dicho camino, éste había sufrido importantes daños, imposibilitando en gran medida su uso peatonal y/o ciclista.