«La seguridad de Bin Laden no está en peligro, la mía sí»

El diputado de Izquierda Unida en el Congreso, Gaspar Llamazares, estudia emprender acciones judiciales por la utilización de algunos de sus rasgos faciales para la elaboración por parte del FBI de un retrato del terrorista Osama Bin Laden, un asunto que calificó de "muy serio" porque pone en evidencia "el escaso nivel de los servicios de inteligencia y seguridad", por lo que pidió al Gobierno que adopte medidas al respecto.

Durante la celebración del Consejo Político Federal de IU, Llamazares ha reconocido que este asunto sería "cómico", si no fuera porque "afecta a personas que no han cometido ningún delito y pone en evidencia el escaso nivel de los servicios de inteligencia y seguridad".

En este sentido, el diputado ha mostrado su malestar ante la falta de explicaciones por parte de las autoridades americanas y dice estar al corriente de las últimas informaciones a través de los medios de comunicación. "Ellos no se han dignado a dar ninguna explicación ni a mi persona ni a Izquierda Unida, que somos los afectados", ha lamentado.

Llamazares se ha mostrado tajante al afirmar que ahora más que nunca no piensa viajar a Estados Unidos ni aunque le invitarán de forma amistosa. "La seguridad de Bin Laden no está en peligro, pero la mía sí", ha argumentado. Asimismo, ha defendido que "lo mínimo" que podía hacer el embajador de Estados Unidos es realizarle una llamada para dar "una explicación convincente". En su opinión, hasta ahora, todo han sido "meras excusas".

"Pensé que era una broma"

Llamazares cree que el Ministerio del Interior, junto con la Policía europea, tendría que averiguar de dónde han salido esas imágenes para saber si, como dice el FBI, vienen de Google o de sus propios archivos. De darse este último caso, a su juicio, el tema "sería mucho más grave". Sin embargo, ha evitado manifestarse acerca de las posibles medidas judiciales que emprenderá la coalición en defensa de su honor e imagen.

Por otra parte, Llamazares espera que todo esto "sea una casualidad" que solamente demuestra el bajo nivel de los servicios de seguridad y la incompetencia. En caso contrario, ha afirmado "se demostraría mala fe". Preguntado por cómo se enteró de la noticia, ha reconocido que al principio no se lo creía y pensó que se trataba de una broma. "Me he dado cuenta de que es serio y por tanto vamos a actuar seriamente", ha sentenciado.