Patxi López recibe la makila de manos de Juan José Ibarretxe. / Efe
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Patxi López promete el cargo de lehendakari «desde el respeto a la Ley» bajo el árbol de Gernika

El ya lehendakari ha eliminado cualquier alusión a Dios y los símbolos religiosos

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El socialista Patxi López, ha prometido, bajo el Árbol de Gernika, símbolo de las libertades y las instituciones vascas, ante los parlamentarios y representantes de otras instituciones vascas, desempeñar su cargo de lehendakari "desde el respeto a la ley". López ha empleado por primera vez una fórmula diferente a la que pronunció José Antonio de Aguirre al jurar su cargo como primer presidente de un Gobierno vasco en 1936 y que tras él usaron en su toma de posesión Carlos Garaikoetxea, José Antonio Ardanza y Juan José Ibarretxe.

El nuevo lehendakari, en coherencia con su laicismo, no ha pronunciado la expresión "ante Dios humillado", como hicieron anteriores presidentes del Gobierno vasco del PNV, sino que ha hecho expresa mención al "respeto a la ley" y a la sociedad vasca.

Tampoco ha estado presente en la mesa juradera el crucifijo y el lehendakari ha hecho su promesa colocando la mano sobre un ejemplar del Estatuto de Gernika, en lugar de hacerlo sobre uno de los 252 ejemplares de la primera edición de la Biblia publicada íntegramente en euskera en 1865, como lo habían hecho sus antecesores.

Tras la promesa, en lugar que ofrecer un discurso, ha leído el poema en euskera Maiatza, de Kirmen Uribe, y otro en castellano, Nada es dos veces de Wislawa Szymboreka, que decía: "Nada sucede dos veces y es lo que determina que nazcamos sin destreza y muramos sin rutina. Ningún día se repite, ni dos noches son iguales, ni dos besos parecidos, ni dos citas similares. Entre sonrisas y abrazos verás que la paz se fragua, aunque seamos distintos como son dos gotas de agua". Con los poemas, ha querido resaltar la faceta social de las personas y la individualidad de los actos. "No es tiempo de discursos, que tienen otro tiempo y otro lugar", ha justificado el socialista vasco.

Traspaso de poderes

Momentos antes, ha asumido el cargo como lehendakari en el interior del Salón de Plenos de la Casa de Juntas de Gernika sobre el ejemplar del Estatuto de Gernika. El lehendakari saliente, Juán José Ibarretxe, le ha entragado la makila (el bastón de mando que representará el intercambio de poderes) entre los aplausos de los invitados al acto puestos en pie.

López, primero en euskera, y después en castellano, ha pronunciado las siguientes palabras: "Tomo posesión y asumo el cargo de lehendakari del Gobierno del País Vasco, así como de la condición de reoresentante ordinario del Estado en su territorio y prometo cumplir las obligaciones de mi cargo con lealtad a la Corona, al Estatuto de Autonomía de Gernika y demás leyes vigentes". Salvo las variaciones ya mencionadas, la ceremonia se ha celebrado siguiendo el protocolo establecido.

La vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, y el vicepresidente tercero del Gobierno, Manuel Chaves; la ministra de Ciencia e Innovación, Cristina Garmendia, el presidente del Senado, Javier Rojo, y el delegado del Gobierno en el País Vasco, Mikel Cabieces, así como la secretaria general del PP, Dolores de Cospedal, han sido testigos de este acto en el que ha habido también representación nacionalista al margen de la presencia de los parlamentarios, como el ex lehendakari José Antonio Ardanza, y han acudido varios presidentes de comunidades autónomas.

El Ejecutivo empieza a trabajar

La promesa y toma de posesión del cargo se celebra después de que el Rey haya firmado el Real Decreto de nombramiento en Lituania, país en el que se encuentra de viaje de Estado. Un día después de que el nuevo lehendakari haya tomado posesión de su cargo, lo harán los consejeros del nuevo Gobierno Vasco y el martes se celebrará la primera reunión del Consejo de Gobierno de López.

Su prioridad será lograr la paz y para ello será fundamental el rechazo social hacia ETA, según dijo ayer a la cadena SER, en su primera entrevista tras ser designado lehendakari. López también acudió ayer a Ajuria Enea, la residencia oficial de los presidentes vascos, para mantener un encuentro discreto con el lehendakari en funciones, Juan Jose Ibarretxe y preparar el relevo.