SUGERENTE. En la muestra, el autor ha tomado como referencia las sensaciones que experimentó durante un viaje a Tokyo. / ÓSCAR CHAMORRO
Cultura

Paco Montañés 'desnuda' en Benot el «hermetismo» de la sociedad japonesa Premio Nacional fin de carrera

El joven artista jienense expone alrededor de treinta dibujos sobre papel de pequeño y gran formato, centrados en el retrato del ser humano y el movimiento

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Las sensaciones experimentadas por el artista durante un viaje a Japón se convierten en el leit motiv de la exposición de dibujos de Paco Montañés, que se inaugura esta tarde-noche en la Galería Benot y que permanecerá abierta al público hasta el próximo 6 de abril. Alrededor de 30 dibujos sobre papel realizados con carbón prensado -una técnica que, según su artífice, dota al negro de un «aspecto aterciopelado»-, cuyo principal referente -fiel a su trayectoria-, es el ser humano.

El tamaño de las piezas varía del pequeño al gran formato, (50X50 a 2 metros), algo que, para Montañés, «refuerza en el visitante la impresión de contraste». Esta selección de cuadros pertenece a una serie que fue posible «gracias a la ayuda de la Junta de Andalucía». La colección está concebida como una especie de análisis sociológico de los habitantes de Tokyo, sus edades, sus condiciones de vida, etc., una cultura que suscita en el autor la curiosidad por la contemplación de una población «misteriosa».

El movimiento, reforzado por el carácter difuso de los retratos, es otra de las constantes, por tratarse de individuos que han sido «descontextualizados» de su entorno habitual. Todos ellos están en permanente tránsito, caminan, no hay cabida para la imagen estática y se presentan desnudos ante el observador, que establece con ellos una «relación silenciosa». De esta forma, vienen a la memoria multitudes que se apresuran absortas a cruzar pasos de peatones en una ciudad plagada de grandes edificios, ruido, luces de neón y que -de súbito-, se congelan para transmitir su opacidad interior. «Los sujetos que plasmo -sin embargo-, son sugerentes por sí mismos, por su hermetismo; esa es la percepción del espectador», explica el artista. «Todo está como escondido, hay que leer entre líneas. Así, se establece el juego de la imaginación, en el que también pueden valorarse la similitudes y diferencias entre países y sociedades». El joven creador está convencido, por otra parte, de que «lo fundamental en el arte es dejarse influir por los demás». De hecho, confiesa que ha copiado tanto a los clásicos como a los contemporáneos. De los primeros, se queda con Velázquez; por los segundos no muestra preferencias concretas: «en general, me fascina lo que sucede».

La muestra se podrá visitar de lunes por la tarde a viernes de 11.30 a 13.30 y de 18 a 21 horas. Los sábados, de 11.30 a 14 horas. Paco Montañés nació en Alcalá la Real (Jaén) en 1980 y pertenece a esa nueva oleada emergente de artistas andaluces. Su formación comenzó en la Facultad de Bellas Artes Alonso Cano -Universidad de Granada-, en cuyo seno ha nacido toda una cantera de reconocidos creadores. En 2004, obtuvo el Premio Nacional fin de carrera de Bellas Artes, otorgado por el Ministerio de Educación. Además, ha participado en numerosas exposiciones individuales y colectivas alrededor de España.