Juanma Moreno, en la terraza de la sede regional del PP, con la Plaza de España al fondo
Juanma Moreno, en la terraza de la sede regional del PP, con la Plaza de España al fondo - JUAN JOSÉ ÚBEDA
ANDALUCÍA

Juanma Moreno: «Tenemos las puertas abiertas para entendernos con Ciudadanos»

La vida de los andaluces no ha mejorado con el pacto del PSOE y la formación naranja, según el líder del PP-A

SEVILLA Actualizado: Guardar
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A pesar del apoyo recibido en el congreso regional, el presidente regional pide a todo el PP que ayude a conseguir un cambio de gobierno capaz de transformar Andalucía. Tiene el viento a favor, pero no se fía. Dice que lo suyo es una carrera de fondo y ni el total apoyo mostrado por el partido la semana pasada en Málaga le da confianza, aunque no pierde la sonrisa.

Es una batalla desigual, insiste. No quiere perder la concentración mientras todos le señalan la obligación de batir una marca hasta ahora inaccesible: presidir el primer gobierno andaluz no socialista. Cuando se le plantea que todo está a su favor, prefiere citar a Churchill: «La cometa vuela más alto con el viento en contra».

Quizás por eso sigue pidiendo unidad y el apoyo para modelar un partido que atraiga a los que nunca lo han votado.

—Ciudadanos le ha mandado el mensaje: lo que tengan que negociar mejor ahora que el último día, pero por pura aritmética parlamentaria cualquier acuerdo puede ponerse ya en marcha. ¿Qué opina de esa relación?

—Ahora mismo Ciudadanos tiene la llave de la gobernabilidad de Andalucía. Creo que el señor Marín se ha dado cuenta que en el ecuador de la legislatura no ha mejorado la calidad de vida de los andaluces. Es más, yo diría que ha empeorado. Su partido es consciente de que no han conseguido cambiar nada y ve que puede haber elecciones. No han sido útiles porque no han presionado sobre los asuntos que tenían que presionar. No entiendo cómo no han presionado para que haya una administración más profesional, para quitar el impuesto de sucesiones, para pedir una auditoría en todas las empresas públicas, como se ha hecho en Madrid; no entiendo cómo no han abordado el modelo de radiotelevisión pública andaluza, o que en la sesión de control las preguntas de Juan Marín parezcan más del PSOE… No lo entiendo yo ni una buena parte de sus electores. Ellos saben que por ese camino no llegarán a nada positivo. Nosotros tenemos las puertas abiertas a entendernos con Ciudadanos, como hacemos en Almería o en Málaga. Nos une con Ciudadanos mucho más lo que nos separa. Nosotros estamos dispuestos, de verdad. Ycon objetivos concretos como bonificar al 99% el impuesto de sucesiones, transparencia en la cuentas y altos cargos de la Junta de Andalucía, nuevo modelo sanitario y de educación. Todo eso podemos hacerlo juntos si presionamos en el mismo sentido.

—Aunque para presionar ya está la calle. ¿Qué cree que está pasando para que la gente proteste precisamente ahora?

—Están pasando cosas muy graves. Los andaluces por primera vez están dando una muestra de enfado. Andalucía necesita que la sociedad salga de ese letargo en el que la quiere el PSOE. Los andaluces tenemos que protestar por muchas injusticias, la sanidad, el impuesto de sucesiones... Confío en la rebeldía pacífica, democrática y cívica y que de una vez por todas le saque tarjeta roja al gobierno de Susana Díaz para que haya alternancia. Somos la única región de Europa en la que no ha habido alternancia.

—¿Le molesta que Susana Díaz sólo se refiera a Rajoy como su contrincante político en el PP?

—Es parte de una estrategia que hace para situarse en la escena política nacional. Le aburre Andalucía.

—¿Cómo va a convencer en la barroca Andalucía a los que sufren el «horror vacui» del día después de la derrota del PSOE?

—Nosotros queremos hacer un gobierno moderado, sensato y muy equilibrado, en que todo el mundo se pueda ver representado. Vamos a hacer cambios para mejor y no para perjudicar a grandes colectivos en Andalucía. Que nadie tenga miedo al cambio sino al inmovilismo, porque el inmovilismo sea más tarde o más temprano sí les afectará de manera directa. Es más importante tomar decisiones ahora que garanticen nuestro modelo del bienestar que no tomarlas y que por ello se nos quiebre definitivamente, solo por no haber tenido la valentía de afrontar el cambio.

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