El día de la gran invasión

Se acabaron la intimidad y la tranquilidad cierta de los primeros días de esta semana. La Feria de Córdoba se desliza imparable a sus días más intensos y por eso recibe hoy a una de las mayores concentraciones del ciclo. Los niños y jóvenes, los segundos solos y los primeros en compañía de sus familias, toman hoy El Arenal para disfrutar de la Feria de Nuestra Señora de la Salud. Se verán así las muchas caras de la cita: la del ocio juvenil y la de la ilusión.

A primera hora de la tarde comenzará el periodo vacacional para los más jóvenes. Los niños tomarán enseguida la Feria, porque es el día en que las atracciones harán descuento y todos querrán aprovechar y no quedarse con las ganas de aprovecharlo todo.

A esas mismas horas, quizá todavía con el almuerzo presente, los jóvenes se irán preparando para el botellón que se celebrará en el Balcón del Guadalquivir, junto al río.

Se volverán a contar por miles los que allí se reúnan, en una cita que el Ayuntamiento quiere controlar por la vía del asumir que no se puede evitar, y que es mejor que sea amiga que enemiga. Para todos habrá un aliado: el tiempo volverá a estar más cerca de los 25 que de los 30 grados centígrados, con ratos de nubes en el cielo que harán que la tarde sea llevadera.

No sólo tendrán vacaciones los que están en edad lectiva, sino también muchas empresas, con lo que no serán pocos quienes se tiren a la fiesta con la sana idea de divertirse y aprovechar. Llegan los días en que no se podrá casi andar por las calles, en que los coches de caballos dejarán de ser excepción para ser regla, y en que el abanico de colores se posará en los trajes de flamenca. La fiesta estará en todo lo alto.