Ocho cuevas en España que han sido reconvertidas en restaurantes
Comedores bajo tierra que trasladan al comensal a un ambiente diferente e involvidable
España guarda muchos secretos bajo tierra, cuevas con encanto donde desconectar en una escapada de fin de semana. Desde las prehistóricas Altamira o Tito Bustillo, en Cantabria y Asturias respectivamente hasta las del Drach en Mallorca o Nerja en Málaga, estos enclaves bajo tierra descubren al visitante los secretos de otros tiempo. Sin embargo existen otras cuevas, muchas de ellas antiguas bodegas, hoy reconvertidas en acogedores restaurantes donde disfrutar de la buena mesa. Estos son ocho ejemplos por España que bien merecen una visita.
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La Cueva del Lobo, en El Molar
En la localidad de El Molar , a 39 km al norte de la ciudad de Madrid está la Cueva del Lobo , un restaurante situado en una de las cuevas excavadas en tres de los cerros que circundan el caso urbano del municipio siendo la fecha de construcción de las cuevas más antiguas de la época de dominación musulmana. En el restaurante podrá degustar sus carnes -chuletitas de cordero, chuletón, entrecot o brochetas-; productos de matanza como morcilla, chorizo, picadillo o chistorra; ensaladas, queso e ibéricos, entre otros productos.
Actualmente en El Molar se contabilizan mas de 400 cuevas repartidas entre tres cerros y alrededor de 200 bodegas donde se hacen vinos de variedades de uvas tales como la tinta, garnacha, moscatel o malvar.
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La Bodega de los Secretos, en Madrid
En el centro de Madrid está La Bodega de los Secretos , un restaurante situado en unas cuevas del siglo XVII, un espacio con hornacinas, cúpulas, arcos y pechinas ornamentadas. Su oferta gastronómica la componen entrantes de todo tipo, una exquisita selección de carnes, pescados y arroces y una amplia carta de postres.
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Las Cuevas de Luis Candelas, en Madrid
Las Cuevas de Luis Candelas , que fue un famoso bandolero en el S. XIX, es considerado uno de los restaurantes con más tradición de Madrid . Situado junto al Arco de Cuchilleros, uno de los diez accesos de la Plaza Mayor de Madrid, el local dispone de varios salones que reflejan distintos ambientes y trasladan a sus clientes a otra época.En 1949, Félix Colomo Díaz, torero madrileño, se enamora de las viejas cuevas bajo el Arco de Cuchilleros y las convierte en restaurante.
En Las Cuevas de Luis Candelas se han recuperado los usos y costumbres matritenses que dan fundamento a su tradición gastronómica. Son varias las especialidades que ofrece, entre ellas destacan sus famosos asados cochinillo y cordero lechal, en horno árabe de leña de encina , los callos a la madrileña, su cocido de puchero o los postres típicos de Madrid. El restaurante ofrece una variada y extensa carta de vinos.
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La Cueva Miñambres, en León
En la provincia de León , la comarca de Valdevimbre es conocida por sus bodegas-restaurante en los que se pueden degustar los platos típicos de la cocina leonesa. La Cueva Miñambres , es uno de esos restaurante situado dentro de una auténtica bodega que data del año 1608. El restaurante se compone de varias salas con espacio para un gran número de comensales y otras con ambientes más íntimos. Entre sus especialidades está la cecina de León; lechazo de Castill asado al horno de leña; carnes rojas de Buey; todo tipo de ensaladas variadas con productos de la tierra o postres caseros, elaborados al estilo tradicional leonés.
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Los Calaos de Briones, La Rioja
El restaurante Los Calaos de Briones está situado en dos cuevas subterráneas de una antigua bodega familiar ubicada en el centro del pueblo de Briones, en La Rioja . En muchos pueblos riojanos es frecuente encontrar calaos o cuevas, situados bajo viviendas particulares, auténticas bodegas tradicionales utilizadas por las familias para elaborar y conservar su propio vino.
El restaurante, que tiene dos comedores, apuesta por platos de cocina tradicional riojana elaborada de forma contemporánea. Se concede un excelente trato a las verduras y en invierno es posible degustar suculentos platos de cuchara típicos de esta región.
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Los Jameos del Agua, Lanzarote
En las Islas Canarias , concretamente en Lanzarote , está el restaurante Los Jameos del Agua, en el interior de un tubo volcánico. Fue César Manrique quien supo imaginar y transformar lo que era el desplome del techo del tubo volcánico por el que corrió la lava procedente del volcán de la Corona.
Su propuesta gastronómica se basa en platos contemporáneos como los pulpitos a la plancha con mojo verde, queso ahumado a la plancha con mermelada de tomate canario, crepes rellenos de corvina y espinacas, delicias de cherne con langostino, emparedado de mero relleno de jamón ibérico, sama sobre velouté de vino malvasía y crujiente de batata o nuestro conejo en salmorejo cocinado a baja temperatura.
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Asador La Gruta, en Almería
A tan sólo 4 Km de la capital Almería , el Asador La Gruta es un original restaurante en el interior de una antigua cantera frente al Mar Mediterráneo. Tranquilidad y bienestar emanan de sus paredes de piedra caliza invitando al comensal a experimentar el placer de degustar carnes y caldos en un ambiente mágico. Además posee una gran bodega con más de 30.000 botellas entre las que están representadas todas las denominaciones de origen. Las instalaciones constan de un amplio hall de entrada y recepción más cuatro salones de diferente capacidad.
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Cuevas Romanas, en Córdoba
El restaurante Cuevas Romanas está situado en Sierra Morena, a escasos minutos de la ciudad de Córdoba . Tiene un gran valor arqueológico ya que está integrado en unas antiguas cuevas que datan de la época en la que se extendió el Imperio Romano en España. El impresionante escenario en el que se distribuyen las mesas del restaurante no hace desmerecer su cocina, con innumerables especialidades muy innovadoras pero basadas en la gastronomía tradicional de Córdoba.
