Los premios de la Real Fundación de Toledo se rinden al Greco

Los premios de la Real Fundación de Toledo han tenido en su vigésima séptima ocasión un protagonista muy especial: el Greco. Una reproducción de la obra «Vista y plano de Toledo» del artista cretense fue ayer testigo, durante la ceremonia, de uno de los galardones más tradicionales que se entregan en la ciudad.

Pasadas las doce del mediodía, la Reina Doña Sofía hacía su entrada en el auditorio, que lleva el nombre del pintor, y era recibida con una fuerte ovación por parte de los invitados. Vestida de negro, su Majestad Sofía presidió la entrega de estos premios, que en esta edición han reconocido la labor de 31 personas y entidades que han contribuido especialmente a la celebración del Año Greco.

La tragedia aérea en los Alpes franceses marcó el inicio de la sesión, que comenzó con un minuto de silencio en recuerdo de los 150 fallecidos. Tras ello, el primero en iniciar la ronda de intervenciones fue el presidente del Patronato de la Real Fundación de Toledo, Juan Ignacio De Mesa, quien destacó que «el 2014 ha sido muy especial para la ciudad, no solo porque se ha celebrado el IV Centenario del fallecimiento del pintor, sino también porque la Real Fundación ha cumplido 25 años en defensa del patrimonio cultural de la ciudad».

En nombre de la fundación que preside, De Mesa agradeció «a todos los que han hecho posible que las actividades del Año Greco se conviertan en una realidad». Tuvo también unas palabras de reconocimiento para la Fundación Greco 2014 por «su entusiasmo y dedicación» para hacer de Toledo «una referencia cultural durante todo el año», además de resaltar el liderazgo de Gregorio Marañón al frente de esta organización.

Igualmente, dedicó este premio a los mecenas que patrocinaron los actos; museos y coleccionistas que prestaron sus obras; comisarios de las exposiciones y a las instituciones por permitir el uso de sus instalaciones para llevar a cabo sus muestras. Y tuvo una mención especial para las acciones desarrolladas por el Cabildo de la catedral primada; para los toledanos, por «ser un público entusiasta»; para los mecenas, por permitir financiar los proyectos de la Fundación Greco 2014, y para la Reina Doña Sofía.

En su alocución, la presidenta de la Junta de Protectores, Eugenia Silva, recordó que en los 25 años que ha cumplido la Real Fundación de Toledo ha realizado más de 500 proyectos con la participación de 140 patrocinadores. También tuvo un guiño para los empresarios que «en tiempos de dificultades económicas para las administraciones públicas hicieron posible la celebración del centenario del Greco con la decisiva financiación del patrocinio privado».

El papel de los prestadores

En nombre de los premiados, intervino el director del Museo Nelsol-Atkins de Kansas City, Julián Zugazagoitia, quien destacó el papel de los prestadores, ya sean públicos, privados e institucionales. Todos, afirmó, están «hermanados» por la gran responsabilidad de ser «los custodios temporales de obras de arte extraordinarias que forman parte del acervo de la humanidad». «En tiempos de la globalización, no hay nada más hermoso que ver in situ las obras que saldrían del taller toledano del Greco para estar en colecciones de todo el mundo; y después salir a la calle y estar inmerso en esta maravillosa ciudad como es Toledo».

A nivel personal, Zugazagoitia apuntó que fue «muy emocionante presenciar cómo Toledo se unió en estas celebraciones». «En las dos ocasiones que tuve la oportunidad de pasearme por la ciudad y ver las exposiciones, lo que más me llamó la atención fueron las interacciones de los vigilantes de las exposiciones, camareros, guías turísticos, taxistas…, todos se volvieron estudiosos del maestro».

«Una importante huella»

Por su parte, el alcalde de Toledo, Emiliano García-Page, manifestó que «el Greco ha dejado una importante huella en la ciudad». Para el edil, esta efeméride «no hubiera sido posible si no hubieran existido intereses colectivos gestionados por todos desde el consenso y el entendimiento por encima de los personales».

El regidor recordó que Toledo está hermanada desde este año con la ciudad natal del Greco, Heraklion. Y tuvo unas palabras de reconocimiento para Jorge Miranda, uno de los impulsores de la celebración del IV centenario del Greco. Para el edil, «Toledo ha estado a la altura de su historia» y esta efeméride ha dejado a la ciudad «agradecida y contenta», manteniendo que «ha sido un año muy bueno y que ha mejorado la imagen de la ciudad a medio y largo plazo».

La presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, fue la encargada de cerrar la ronda de discursos. Aseguró que estos premios suponen «el reconocimiento a muchas instituciones» y «la labor de la Real Fundación en el cuidado del patrimonio». Cospedal recalcó que la fundación «ha sabido entender que el patrimonio es necesario para el crecimiento económico y social», y felicitó a los premiados porque «trasladan lo que se es capaz de hacer todos juntos». Además, destacó que «el legado de Toledo es un emblema de lo que quiere ser el país» y «el patrimonio es la herencia colectiva de un pueblo y, cuando este se enfrenta con el presente, se puede llegar a un futuro prometedor».

El acto finalizó con la entrega a Doña Sofía de una mención especial por su «entusiasta participación en las actividades» de esta conmemoración, La Reina agradeció el premio y el «gran cariño» recibido en Toledo. No se olvidó de la tragedia del A320 de Germanwings: trasladó su «más sentido pésame» y todo su «afecto» a las familias de los fallecidos.