El PP rechaza la supresión de los municipios de menos de 5.000 habitantes

Los alcaldes del PP de la provincia de Toledo han elaborado un manifiesto en el que rechazan «con contundencia» la eliminación de los municipios menores de 5.000 habitantes y se postulan, por tanto, en contra de la «ocurrencia» que ha lanzado en tal sentido el partido Ciudadanos. En rueda de prensa, la diputada provincial y alcaldesa de Guadamur, Sagrario Gutiérrez, leyó el manifiesto que defiende la autonomía del Ayuntamiento de menos de 5.000 habitantes «como el órgano al que corresponde ordinariamente el gobierno y la administración municipal».

Gutiérrez, a la que acompañaron los alcaldes de Lominchar Escalonilla, en representación de las poblaciones más pequeñas con gobierno del PP, añadió que «rechazamos aquellas propuestas de formaciones políticas que propugnan fusiones frías de municipios pequeños, que rechazamos con contundencia, pues ello supondría una pérdida de identidad y de derechos alcanzados por sus vecinos».

«No se puede atentar gratuitamente contra la identidad de un pueblo, su autonomía de decisión y gestión, y, por tanto, su autonomía como municipio», afirmó, al tiempo que rechazó que se considera a Ayuntamientos «de segunda a aquellos que, por motivos de población, puedan sentirse desprotegidos o maltratados».

En el documento se amplia que «las reclamaciones de fusiones de municipios menores de 5.000 habitantes, e incluso de desaparición de las Diputaciones provinciales, son frases lapidarias que no se sustentan en la realidad territorial de España». Por ello, dijo que «cuestionar los Ayuntamientos más pequeños es poner en tela de juicio nuestra Carta Magna y el respeto por los municipios españoles y de todos sus habitantes».

En el caso de la provincia de Toledo, la alcaldesa de Guadamur detalló que «175 de las 204 localidades son menores de 5.000 habitantes, es decir, el 85,78 %» y, por ello, su supresión sería «una regresión histórica» y «la desaparición absoluta del municipalismo». «La propuesta no es sino una ocurrencia, desconocer la realidad y un atentado contra la Constitución», concluyó.