Continúa la polémica tras el trasvase aprobado esta semana

La Comisión Central de Explotación del Acueducto Tajo-Segura aprobó un trasvase de 38 hectómetros cúbicos (hm3) de agua para este mes entre esas dos cuencas, según informó el Sindicato Central de Regantes de esa infraestructura (Scrats). Tras el acuerdo, los dos principales partidos de Castilla-La Mancha, PP y PSOE, se engancharon por lo que supone el nuevo trasvase. Si para el PP la región hoy sí que tiene garantizada el agua «en calidad y cantidad suficiente para todos los usos»; para el PSOE «es tan vergonzoso que los gobiernos de Rajoy y Cospedal lo han tenido que esconder a la opinión pública».

Carmen Riolobos, portavoz del PP en Castilla-La Mancha, reprochó al PSOE que critique el acuerdo cuando «en 30 años fueron incapaces de resolver el problema del agua».

Para Riolobos, informó Efe, el PSOE «se caracteriza siempre por criticar, alarmar e intentar engañar a los ciudadanos», ya que «si ha habido un Gobierno que ha resuelto el problema del agua ha sido el Gobierno del PP».

Riolobos asegura que con el nuevo plan de cuenca, Castilla-La Mancha tiene «más agua de la que tenía con el PSOE». Un resultado que es fruto de «un intenso trabajo, intensas negociaciones y aplicar criterios de defensa de los intereses de la región rigurosos y serios». En cambio, los socialistas «fueron incapaces de resolver el problema del agua y mantuvieron una brecha abierta siempre, una espada de Damocles».

La portavoz de los populares recordó que, con el nuevo plan de cuenca del Tajo, se ha establecido una reserva mínima de 400 hectómetros cúbicos en los pantanos de cabecera, al tiempo que se ha conseguido que «por primera vez se contemple que como mínimo el caudal de Talavera sea de 10 metros cúbicos por segundo». «Todos han visto con el PSOE que el Tajo se secaba por Talavera de la Reina y aparecían peces muertos en el río», añadió.

Por todo ello, Riolobos asegura que la región tiene garantizada el agua «para todos los usos», así como para mantener una reserva estratégica en cabecera y para conservar unos caudales ecológicos y medioambientales, algo que «antes no había».

«Es una barbaridad»

Mientras Antonio Luengo, portavoz de Agua del PSOE en Castilla-La Mancha, criticó que el trasvase se haya aprobado «de tapadillo, como si se estuviera haciendo algo malo». Luengo denuncia que el Ministerio de Agricultura haya dado el visto bueno a un envío de 38 hectómetros cúbicos de agua hacia el Levante solo para este mes, una cantidad que «es una barbaridad, porque es casi el doble de la cantidad mensual que han estado trasvasando durante enero, febrero y marzo».

Según informó Efe, Luengo cree que es «peor aún si se pone en comparación esos 38 hectómetros cúbicos que van a salir del Tajo este mes con lo que ha ocurrido en Murcia en marzo». Y recordó que «hasta los propios regantes de Murcia reconocen que las lluvias del mes pasado en la cuenca del Segura han sido de las más abundantes de los últimos 55 años».

Frente a esa situación, dice Luengo, los pantanos de cabecera en Entrepeñas y Buendía «están en una situación tan excepcional que las decisiones sobre los trasvases las tiene que tomar el Ministerio y no la Comisión de Explotación».

Asimismo, recrimina a la presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, que siga «sin levantar la voz para no perjudicarse ella misma ahora que está tan cuestionada dentro del PP como secretaria general para no molestar a Murcia y a Valencia». «Es una vergüenza que tengamos que soportar como ciudadanos de Castilla-La Mancha a un Gobierno regional tan rendido y tan entregado a los intereses de un partido político», concluyó Luengo.