El joven que no ha fichado por el Deportivo de La Coruña por un tuit ofensivo

Un comentario en una red social ha cambiado brúscamente el camino que tomaba la vida de Julio Rey Abalo, un joven futbolista nacido hace 20 años y medio en Vilagarcía de Arousa. En menos de 24 horas ha pasado de fichar por el Deportivo de La Coruña para militar en su equipo filial a quedarse en paro. Todo por un desafortunado mensaje en Twitter en octubre de 2012, cuando tenía 17 años. Una vez más, el pasado escrito y grabado en internet termina pasando factura con intereses.

Sin mayor repercusión mediática por tratarse de una joven promesa, el Dépor anunció en la tarde de este lunes la incorporación a sus divisiones inferiores de Julio Rey, jugador gallego que venía de completar su formación en clubes catalanes como el Español y el Pobla de Mafumet.

Nada hacía presagiar que su fichaje atraería la mirada de la implacable memoria de la Red, pero en pocas horas comenzó a circular el «tweet» que puede verse sobre estas líneas: «Puta Depor, Puta Riazor». En el momento en que fue publicado, el Deportivo jugaba contra el Barcelona, un partido que terminó perdiendo por 4-5.

El debate sobre lo acertado o no de su fichaje se encendió entre la afición coruñesa; y pasadas las nueve y media de la noche, el club anunció que desestimaba su incorporación «por insultar al club».

El Deportivo desestima el fichaje Julio Rey por insultar al Club http://t.co/fR5jaGmsW1pic.twitter.com/qtQSXiDJbH

— RC Deportivo (@RCDeportivo) July 20, 2015

«El Real Club Deportivo, que había anunciado el fichaje de Julio Rey a media tarde después de que el jugador hubiese firmado el contrato que lo vinculaba con la entidad blanquiazul, ha decidido no completar el acuerdo tras analizar los desafortunados comentarios vertidos por el jugador en un perfil personal en las redes sociales años atrás. El Real Club Deportivo entiende que un jugador merece vestir la camiseta blanquiazul si es un ejemplo de deportividad, respeto por los rivales, compromiso y sentimiento positivo hacia el Dépor, sus colores, su escudo y los valores que la institución representa», explica el comunicado de la entidad herculina.

El futbolista ha borrado rápidamente su cuenta de Twitter, pero su gesto parece haber llegado demasiado tarde. No jugará en el Deportivo. Deberá buscar nuevo club y, por si las moscas, revisar a fondo sus comentarios en las redes sociales. No es el primero ni será el último que pierde una oportunidad de empleo por sus intervenciones en Twitter.

Después de que la entidad gallega cancelase la contratación, emergió en la red un nuevo elemento que llena de interrogantes esta historia. Un familiar del jugador había colgado en Twitter una foto para celebrar el fichaje finalmente fallido, en la que se ve a Julio Rey de niño con la camiseta del Deportivo. Está posando junto a otros niños con José Manuel Pinto... entonces guardameta del Celta, eterno rival del conjunto herculino.